Organizados en cuadrillas, dotados de equipo de seguridad y con estrategias claras, los Bomberos Forestales combaten el fuego para proteger la Reserva de la Biosfera Sierra de las Minas (RBSM), que va de Los Amates, Izabal, a Morazán, El Progreso.
Las tareas, se explica, abarcan desde acciones de prevención hasta intervenciones durante las emergencias.
Alfredo Chajón, técnico encargado, afirmó que el trabajo de previsión incluye charlas de sensibilización en escuelas, universidades, consejos comunitarios de desarrollo y población en general. Estas se realizan con el objetivo de concientizar a los comunitarios y de persuadirlos para que no le prendan fuego al bosque.
También se informa sobre la trascendencia que tiene la reserva para el medioambiente.
La labor durante los siniestros dependerá de la gravedad del incidente. En una situación menor abren brechas cortafuego que permiten amortiguar el incendio desde la parte baja.
Se señala que cuando hay fuego desde la parte de arriba de las brechas se complica la labor, ya que deben entrar directo a la zona afectada, lo que expone su integridad.
Las herramientas de trabajo incluyen escobilla, rastrillo, McLeod, pulaski, mechero de goteo, bomba forestal con agua, entre otras.
Los bomberos forman parte del Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap) y de la Fundación Defensores de la Naturaleza (FDN).
10
Personas integran las cuadrillas que cubren las emergencias.