De 2020 a la fecha, el Estado desembolsó Q 6572 millones para agua y saneamiento en el ámbito nacional, con el fin de mejorar la calidad de vida y salud de los guatemaltecos y combatir la desnutrición. La cifra incluye Q 5678 millones en proyectos y Q894 millones en intervenciones en la citada materia.
Así lo informaron ayer las autoridades durante una conferencia de prensa organizada por la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia (Segeplan), en el Patio de la Vida del Palacio Nacional de la Cultura.
En cuanto al monto desembolsado para las obras, destacan que Q3684 millones correspondieron a trabajos en agua y Q 1994 millones para saneamiento. El 54.7 por ciento de la ejecución estuvo a cargo de los consejos departamentales de desarrollo; 38 por ciento, a los gobiernos locales y 7.3 por ciento, a la administración central y entidades descentralizadas.
3 mil 684 millones de quetzales fueron destinados a agua.
Las faenas abarcaron la potabilización del líquido vital, perforación de pozos, tanques de mampostería, bombas manuales y depósitos para almacenamiento de precipitaciones pluviales.
Además, alcantarillados, tratamiento de aguas residuales y desechos sólidos y letrinas, entre otros.
Histórico desembolso
La cantidad erogada en la presente gestión, para atender el mencionado problema social, es mayor que la de cada uno de los tres gobiernos anteriores. De esa cuenta, se resaltó que de 2008 a 2011 la cifra fue de Q 2244 millones; de 2012 a 2015, Q 2149 millones, y 2016 a 2019, Q 5289 millones.
El informe “denota la inversión que hemos venido haciendo como una de las prioridades del país. Esto refleja la importancia que el tema ha tenido para el Presidente de la República en el combate a la desnutrición crónica y aguda”, afirmó el jefe de la Comisión Presidencial de Asuntos Municipales (Copresam), al concluir la rendición de cuentas ofrecida.