En 2022 las ventas nacionales al exterior crecieron 15.2 por ciento y, por segundo año consecutivo, aumentaron dos dígitos. La última vez que eso ocurrió fue en 2011, de acuerdo con cifras acutalizadas del Banco de Guatemala (Banguat).
El comercio general se ubicó el año pasado en US $15 684.3 millones, mayor en US $2064.5 millones (15.2 por ciento) al monto registrado en 2021 (US $13 619.8 millones).
Los productos más importantes, según su participación en el total de las exportaciones, fueron artículos de vestuario con US $1846.6 millones (11.8 por ciento), así como aceites comestibles con US $1182.9 millones (7.5 por ciento).
Además, el Banguat menciona el café, con US $1112.7 millones (7.1 por ciento), banano, con US $942 millones (6 por ciento) y azúcar, con US $796.7 millones (5.1 por ciento). “Estos productos representaron el 37.5 por ciento del total exportado”, comunicó la banca central.
Istmo gana terreno
Coincidentemente, en ese mismo tiempo (2021-2022), Centroamérica fue el mayor comprador de los productos nacionales, superando a Estados Unidos, que históricamente ha sido nuestro
principal socio comercial.
A la región se exportó en 2022 US $5268.1 millones (33.6 por ciento) y a la nación estadounidense US $4878.7 millones (31.1 por ciento del total), según las cifras oficiales.
Honduras y El Salvador fueron los principales destinos de las ventas al Istmo, acumulando entre ambas naciones el 69 por ciento (US $3634.8 millones).
Con la nación catracha, el país tiene, desde 2017, un acuerdo de unión aduanera que facilita el comercio entre ambos territorios. Los salvadoreños están en proceso de integrarse plenamente.
Con la adhesión salvadoreña se agilizará el intercambio de bienes y mercancías en un mercado de más de 32.1 millones de habitantes, que representa el 73.7 por ciento de la población del Istmo, según el Sistema de Integración Centroamericana (Sica).