En los recientes dos años, la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia (SBS) ha impulsado un proceso de cambio en las Residencias de Protección, la mejora de los protocolos y manuales operativos administrativos, así como la capacitación de su personal, con el fin de mejorar la atención a los menores de edad víctimas de violencia.
Con ello se busca “darles una atención integral, ya que también contamos con nutricionistas, médicos, psicólogos, trabajadores sociales y educadores. Además, hemos implementado una alternativa adicional, que es el acercamiento a la espiritualidad”, afirmó Carlos Gómez, subsecretario de Protección de la SBS.
20 son los recintos que están a cargo de la SBS.
Nuevas residencias
A la fecha, se han cambiado 10 Residencias de Protección, de un total de 20 con las que se que cuentan, para que los adolescentes tengan espacios más adecuados. “Hay algunas que no necesitan ser renovadas y, por lo tanto, nos hemos quedado con ellas.
Nos falta cambiar otras seis y eso será este año”, remarcó Gómez.
Los nuevos hogares brindan espacios más amplios, con más ventilación y luz. Tienen áreas para actividades lúdicas como futbol, basquetbol y atletismo, citó a modo de ejemplo.
Perfiles
En los 20 hogares de Protección la SBS alberga, en promedio, a 700 y 750 niños y adolescentes, a quienes se les ha vulnerado sus derechos, y a algunos adultos que no tienen familia y que están en un lugar especial.
En las residencias se atiende a menores de edad que han sufrido maltrato en todas sus formas o tienen padres negligentes, que no les dan la atención debida o que los abandonan.
También hay quienes están por consumo de sustancias psicoactivas o por situación de calle, así como por violencia sexual, abuso, trata de personas o discapacidad. Permanecen en los hogares hasta que, en conjunto con la Procuraduría General de la Nación (PGN), se ubica a un familiar idóneo que se haga cargo de ellos.