Las naciones de Guatemala, El Salvador y Honduras, también conocidas como Triángulo Norte de Centroamérica, se comprometieron ayer, en Antigua Guatemala, a fortalecer los esfuerzos conjuntos para combatir la trata de personas.
“Este es un compromiso que nos obliga a seguir trabajando en contra de este flagelo que nos afecta mucho como países. Sigamos luchando unidos”, afirmó el vicepresidente Guillermo Castillo luego de firmar una declaración conjunta de buena voluntad para la articulación de esfuerzos contra
dicho delito. El documento también fue signado por los vicegobernantes Félix Ulloa, de El Salvador, y Ricardo Álvarez de Honduras.
En este reconocen que la lucha contra el delito de trata de personas, que es llevado a cabo por el crimen organizado y con carácter transnacional, “necesita de esfuerzos articulados por los Estados” y que “solo unidos se podrá enfrentar esta problemática”.
La declaración conjunta se hizo al final del Simposio Internacional Articulando Experiencias Regionales en la Prevención y Combate de la Trata de Personas, que empezó el 9 de noviembre en la Ciudad Colonial.
En el evento también participaron fiscales de los entes encargados de la persecución penal de los tres países centroamericanos, así como otras entidades vinculadas a la lucha contra dicho flagelo.
Durante la actividad se debatió y llegó a acuerdos sobre cómo redoblar esfuerzos para detectar casos locales de trata de personas y mejorar el intercambio de información para desarticular redes delictivas internacionales.
En otro tema, el vicemandatario guatemalteco también agradeció al embajador de Estados Unidos (EE. UU.), William Popp, por el apoyo al desarrollo de las comunidades que integran el Plan Trifinio y que forman parte de las naciones del Triángulo Norte de Centroamérica.