Funcionarios del gobierno de Guatemala, entre ellos el ministro de Gobernación, Enrique Degenhart, y el director de la Policía Nacional Civil, Carlos Tohom, participaron esta mañana en un homenaje póstumo a las 21 víctimas de la Escuela de Cadetes de Colombia, que murieron tras la explosión de un carro bomba el jueves pasado.
El acto se efectuó en la sede de la embajada colombiana, ubicada en la zona 14, donde el embajador Juan Hurtado Cano agradeció la solidaridad del pueblo guatemalteco ante la tragedia que enlutó a los colombianos.
“Mueren en semejante acto demencial y brutal en nuestra patria colombiana, tal como hemos sufrido los embates de la peor guerra que es el terrorismo. De la insensatez de muchos sucede esta tragedia, que no sé cómo calificarla”, expresó durante su alocución el jefe de la misión diplomática.
Durante el homenaje, también participaron miembros de la embajada de Ecuador, cadetes de la Policía Nacional Civil y Policía Militar, quienes depositaron ofrendas florales en memoria de los fallecidos.
Degenhart expresó sus condolencias en nombre del gobierno de Guatemala y condenó el atentado, que cobró 21 víctimas mortales y causó heridas a 68 personas más.
El atentado ocurrió el 17 de enero, cuando un vehículo con 80 kilos de explosivos, que conducía José Aldemar Rojas Rodríguez, ingresó abruptamente a la Escuela de Policía General Santander, en Bogotá, y chocó contra uno de los edificios. Tras la colisión, detonó la bomba con el saldo ya mencionado.