Durante la primera sesión de Jefes de Estado y de Gobierno de la XXVI Cumbre Iberoamericana, en Antigua Guatemala, se abordaron temas relativas a la migración, teniendo como eje central el respeto, la dignidad y la seguridad de los migrantes.
El presidente Jimmy Morales llamó a las naciones de la región a ratificar la Convención sobre la Protección de los Derechos de los Trabajadores Migrantes, como “señal concreta de que la comunidad iberoamericana defiende los derechos” de estos.
El Presidente de México, Enrique Peña Nieto, pidió en su intervención en la XXVI Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno que la región actúe “con apego” a los principios y compromisos de esa iniciativa, y subrayó que la mejor manera de evitar la migración involuntaria “es promover desarrollo interno en nuestras naciones”.
Por su parte, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, dijo que se necesitan “marcos regulatorios que garanticen los derechos de los migrantes y permitan a nuestras sociedades beneficiarse de las bondades de una inmigración ordenada y garantista”.
Juan Orlando Hernández, Presidente de Honduras, expresó que están impulsando acciones para atacar causas que generan la migración, asimismo mencionó la importancia de atender y proteger de manera digna a los migrantes en el exterior, donde se hagan valer como en todo el mundo sus derechos como seres humanos.
“Se busca mediante políticas integrales migratorias basadas en los derechos humanos y protección de migrantes, evitar la discriminación y xenofobia para una migración segura, ordenada y regular”, indicó Carlos Alvarado, mandatario costarricense.
Por otro lado, Evo Morales, Presidente de Bolivia, subrayó que es fundamental que las políticas migratorias cuenten con un enfoque basado en derechos que lleven a un mundo sin muros hacia la ciudadanía universal.
“La inclusión implica respeto al otro”, concluyó Lenín Moreno, mandatario de Ecuador, quien al igual que el resto de gobernantes iberoamericanos buscan lograr igualdad y equidad en derechos.