Fotos: Andrés Manuel López Obrador y Reporte Índigo
Andrés Manuel López Obrador culmina una carrera política exitosa, en la que ha tenido una trayectoria identificada con un enfoque orientado hacia la nacionalización de los recursos naturales y la protección de las clases desfavorecidas.
Dos veces intentó sin éxito llegar a la Presidencia: la primera vez, contra Felipe Calderón, del PAN, y la segunda, contra Enrique Peña Nieto, del PRI.
Finalmente, al término de su tercera campaña, el 1 de julio de 2018, con poco más del 50 por ciento favorable de votos, el organismo electoral lo declaró ganador.
Fue ese el fruto de un laborioso proceso que incluyó la fundación, en 2011, del Movimiento de Renovación Nacional (Morena), un partido de masas, una organización que no es ocasional, y por consiguiente no es electorera, sino permanente. “Se entendió lo importante de la concientización”, dice AMLO, acrónimo del gobernante.
“Hay que ir pueblo por pueblo. Cuando comencé en Tabasco, nos reuníamos con tres o cuatro amigos. Nos tocaba visitar casa por casa. Yo iba con un morral y una gorra, y les entregaba a los vecinos un volante. Para hacer ese trabajo, la mística es fundamental”. Es fácil suponer que los socialistas, que en México han existido desde 1917, también encontraron en Morena una vía para encauzar sus inquietudes políticas.
Los resultados del Gobierno
Una vez en el Gobierno, el problema era llevar a la práctica las promesas de campaña. “Por el bien de todos, primero los pobres”, fue uno de sus principales compromisos.
De acuerdo con datos del Seguro Social, los trabajadores registrados son 22 millones, lo que sitúa a México como el tercer país con menos desempleo, en el ámbito mundial. Los programas sociales alcanzan a 30 millones de hogares. Se han otorgado 12 millones de becas desde el nivel preescolar hasta el posgrado con una inversión de 5 mil millones de dólares.
En cuanto a la presencia femenina, en la administración, se ha alcanzado una paridad absoluta con 10 mujeres y 10 hombres.
Por otra parte, se fortaleció a las empresas con inversión en hidroeléctricas, las cuales aumentaron su producción para llegar al 55 por ciento de energía limpia.
Uno de los resultados más espectaculares alcanzados por la gestión de AMLO es la reforma judicial, que permitirá elegir a jueces y magistrados, algo que todavía desencadena fuertes discusiones.
Los resultados obtenidos en los últimos seis años de gobierno en México se inscriben dentro de lo que AMLO llama “La Cuarta Transformación”. La Subsecretaria de Integración Desarrollo, Cristina Laurell, condensa así el concepto: “La esencia es poner en primer lugar a la población más rezagada y hacer efectivo el derecho a la protección de la salud”.
La denominación numérica implica que hubo una primera transformación, situada por AMLO en la Guerra de Independencia, que comenzó en 1810 y terminó en 1821. Un movimiento encabezado por Miguel Hidalgo y José María Morelos que culminó con la Declaración de Independencia.
La segunda transformación se identifica con la Guerra de Reforma, en el período de 1858 a 1861, un movimiento encabezado por Benito Juárez, que condujo a la formación de un Estado Nacional.
La tercera transformación fue el conjunto de cambios obtenidos por el movimiento dirigido por Francisco Madero y Emiliano Zapata, que llevó a promulgar la Constitución de 1917, vigente todavía hoy, con algunas modificaciones.
Y después: a La Chingada
AMLO ha dicho que se retira de la política a la vida privada. Esto significa que se va a su “quinta”, en donde probablemente escriba sobre sus experiencias en la política de México.
Su terreno es conocido con el llamativo nombre de La Chingada. En una extensión de 13 mil 500 metros cuadrados (menor a dos campos de futbol) hay árboles tropicales maderables, como cedros y algunas variedades de aves. También hay un estanque. AMLO ha explicado que el nombre le fue puesto a la finca por Genovevo O, un revolucionario que durante la Segunda Transformación se unió a las filas de Emiliano Zapata, a quien le preguntaba “¿A dónde va, Genovevo? él contestaba: “Voy a La Chingada”.