Todos los pueblos, culturas y civilizaciones experimentan sentimientos de veneración hacia sus antecesores, y lo expresan de diferentes maneras, de acuerdo con su concepción del mundo, de la vida y de la muerte. Esos sentimientos se manifiestan con ceremonias y ritos, que constituyen prácticas de origen milenario.
El enterramiento más antiguo conocido data de 60 mil años, y fue encontrado en 1960, en una caverna de Shanidar, en los montes Zagros, al norte del actual Irak. Ralph Solecki, profesor de Antropología de la Universidad de Columbia, dice que se trata del “más asombroso de los enterramientos neanderthalenses”.
Las investigaciones revelaron que un cazador había sido enterrado, y sobre su cuerpo sus compañeros pusieron “numerosas especies de flores de colores vivos afines al jacinto, al azulejo de los sembrados, a la malva y a la hierba cana”.
La acumulación de entierros conduce a la formación de una ciudadela, por eso a toda ciudad adyace una ciudad menor, en la que descansan los ancestros; generaciones precedentes que fueron los edificadores de la gran ciudad.
El cementerio de la ciudad
En el caso de la Nueva Guatemala de la Asunción, esa ciudadela es el Cementerio General, en cuyo diseño hay calles y avenidas, arboledas y jardines.
La maestra y Doctora en Letras, Frieda Liliana Morales, dice que el cementerio fue diseñado a semejanza de la ciudad de Guatemala, “con un trazo ajedrezado, en el que las manzanas de terreno son conocidas como cuadros”.
El cementerio, que se extiende desde la 19 hasta la 26 calle, y de la 4a. a la 7a. avenida, de la zona 3, fue diseñado y construido durante el gobierno del general Justo Rufino Barrios. La construcción fue precedida por tres edificaciones.
Morales explica que el cementerio estuvo situado inicialmente, de 1770 a 1779, detrás del edificio de la Catedral Metropolitana, en lo que hoy conocemos como Mercado Central, y se le llamaba “Cementerio del Sagrario”.
En 1779 fue trasladado a una segunda ubicación, en el parque Enrique Gómez Carrillo, conocido anteriormente como Jardín de la Concordia. En ese lugar se le conoció como Camposanto de los Remedios.
En su tercera ubicación, en 1833, después de la declaración de la independencia, en 1821, el cementerio fue situado en las proximidades del Hospital San Juan de Dios, con el nombre de Cementerio San Juan de Dios.
Traslado a zona 3
En su ubicación cuarta y definitiva, el cementerio fue construido en 1878, en un terreno de una finca llamada
Potrero de García. El Cementerio General comenzó a funcionar a mediados de 1881, “con el primer entierro oficial del señor Ignacio Zamora, originario de Sololá”, explica Frieda Liliana. “Ese mismo día fue enterrado José María López, de 3 meses, y Justo Vásquez, de 14 años”.
La ciudadela es también el punto en el que los pobladores se encuentran para rendir homenaje y expresar su veneración a los miembros de la familia que ya se han ido. En Guatemala, como en los demás países de América Latina, los pobladores en grupos familiares dedican el 1 de noviembre a la celebración del Día de Todos los Santos.
“Es una solemnidad cristiana que tiene lugar el 1 de noviembre, y que es celebrada por las iglesias católicas de rito romano”, explica el padre Pedro Sánchez, quien advierte que “no se debe confundir con la conmemoración del Día de los Fieles Difuntos, que se celebra inmediatamente después: el 2 de noviembre”.
Estas fechas solemnes también se celebran ahora en los cementerios privados, que se han extendido para ofrecer en el ámbito particular los servicios de enterramiento.
Conforme a la tradición popular, los pobladores acuden a los cementerios para recordar a sus difuntos, tanto el primero como el segundo día de noviembre, porque eso permite a las familias reunirse con los recuerdos de los que ya se fueron.
La tradición indígena también respeta los dos primeros días de noviembre para la celebración.
Los cementerios se llenan de colorido y tradiciones, según la costumbre de cada pueblo.
Familiares de los difuntos, además de adornar con flores, llevan platillos y conservas, y los comen junto a las tumbas.