Como muchos migrantes que arriegan su vida para cumplir el llamado sueño americano, para mejorar su situación económica y ayudar a la familia, Dany López viajó a Estados Unidos y sobrepasó sus propias espectativas.
López es originario de Concepción Chiquirichapa, Quetzaltenango, y en la actualidad es el representante en Guatemala de la empresa Benjamin Moore.
Él abrió una tienda de pinturas primiun ecológicas, es decir, que no contaminan el ambiente ni tienen olor. El quetzalteco de corazón sigue cosechando éxitos y, por si fuera poco, da empleo a 30 guatemaltecos y su meta es instalar otras tiendas en el país.
El amor por su familia, su país y sus connacionales es grande. El empresario es reconocido en las cortes federales de Estados Unidos por su colaboración como intérprete de mam e inglés.
En Washington también tiene una empresa de remodelación de viviendas que tiene como nombre Dany Painting, cuya apertura fue en 2004; ahí trabajan 10 chapines.
No fue fácil llegar a donde estoy
Dany tiene 40 años y recuerda cómo ha cambiado su vida. Cuando apenas tenía 2 años de vida falleció su papá, don Emiliano López. En ese momento su mamá, Elogia Juárez, quien ya falleció, no podía cuidarlo ni alimentarlo, y lo llevó donde su tía.
“Mi madre tuvo que tomar esa decisión porque somos 10 hermanos”. Yo crecí con mi tía Julia Juárez. Mi niñez fue súper difícil; me puse zapatos hasta los 12 años, trabajé en el campo y aprendí a sembrar granos, vendí pulseras, dulces y lustré zapatos, entre otros trabajos, recuerda.
Pero mi sueño era irme a Estados Unidos, dice tras un suspiro. “No quería irme por tierra, hasta que mis hermanos que estaban allá me dijeron que su jefe necesitaba personal y me mandaron a traer, pero me dieron la visa H2B2”.
Tenía 25 años cuando llegué a Estados Unidos, en 2002. Trabajé en una empresa como limpiador de vidrios de lunes a viernes. Como no sabía nada de inglés y lo primero que pronuncié fue number one big mac, eso compré con mi primer pago. Era lo único que podía pronunciar (sonríe).
Para comunicarme con mi jefe fui a la escuela Thomas Jefferson, para aprender inglés en 6 meses y así terminé el bachillerato. Trabajaba y estudiaba.
Los fines de semana ayudaba a sus hermanos a pintar. Donde trabajaba llegó una señora, a quien le preguntó si tenía algo para pintar y le dijo que sí: un barandal. Fuí a pintar y después de dos semanas me preguntó cuanto me debía. No se, le dije, yo solo quería un trabajo extra, lo que sea su voluntad, y ella me dio un cheque por 450 dólares.
Así fue de casa en casa y, dada su constancia y su fe, hasta mandó a hacer tarjetas de presentación y empezó a realizar trabajos de remodelación y pintura.
En 2004 le dieron un registro para poder abrir un negocio. Compró pintura y así llegó a la empresa Benjamín Moore, donde le atendió Fernando Gómez. Yo le compraba pintura y un día le dije “¿Cuándo llevamos esta tienda a Guatemala?” Él sonrió y me respondió “un día será”.
El mes pasado, Dany inauguró una tienda de pinturas en el Centro Comercial Century Plaza, zona 13, la cual genera 30 empleos. En 2019 espera inaugurar otra en Quetzaltenango.