Para un militar, constituye un reto dejar su país y su familia por un largo período, especialmente con lo desafiante de la pandemia del coronavirus en la actualidad.
Así lo describe el comandante Armando Emiliano Zaldaña, de los cascos azules guatemaltecos que se integraron a la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en la República Democrática del Congo (Monusco).
La tarea del oficial, desde que incursionó a dicho contingente, ha sido la planificación operacional y el apoyo en entrenamiento, así como el reconocimiento y guías aéreas y terrestres, las patrullas de largo alcance, las operaciones de incursión, recuperación y rescate de personal importante o miembros de la Organización de las
Naciones Unidas (ONU).
Zaldaña dijo a Noticias ONU que para optar a una plaza de contingente de fuerzas especiales, se debe cumplir un proceso de selección que, si es superado, le permite al soldado iniciar con el entrenamiento y capacitación, orientados al mandato establecido y firmado por los organismos internacionales.
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años hace que Guatemala participa en misiones de paz.
“Esta es mi primera misión, y estoy muy satisfecho del trabajo realizado, y de la tarea del contingente como unidad de fuerzas especiales en la Monusco”, aseguró Zaldaña.
Agregó que decidió unirse a las fuerzas armadas de su país, ya que desde pequeño admiraba a quienes pertenecían al Ejército de Guatemala.
“Fue una decisión muy voluntaria, con una visión bien definida de ser oficial del Ejército, gracias al apoyo incondicional de mis padres, que en todo momento estuvieron al tanto de mi desempeño como estudiante de la Escuela Politécnica, hasta graduarme de oficial del Ejército, en 1995”, aseveró el entrevistado.
“Estoy satisfecho por el trabajo realizado por el contingente de fuerzas especiales.” Armando Zaldaña Oficial del Ejército de Guatemala
Según el jefe militar, el trabajo que realiza el contingente está establecido en el memorándum de entendimiento suscrito entre la Monusco y Guatemala. Añadió que las tareas que se realicen siempre serán desafiantes, tomando en cuenta que la seguridad en la República Democrática del Congo es muy variable y volátil.
“Algo desafiante para todo el personal es iniciar una misión bajo ese contexto, y el de una pandemia que afecta a todo el mundo”, subrayó el casco azul.
Desde 1994, cuando se desplegó tres contingentes en la Misión de las Naciones Unidas en Haití (Unmih), Guatemala ha estado participando en distintas operaciones de paz en el mundo.