Recuerdo que tenía ocho años cuando escuché Beat It, uno de los éxitos de Michael Jackson. La primera vez que lo escuché, me pareció que tenía uno de esos solos de guitarra imposibles de replicar.
Después, en el cine, en Back to the Future, hay una escena en la que Marty McFly sube al cuarto de su padre con el traje radioactivo y le pone un cassette con el nombre de “Edward Van Halen”. Recuerdo el resuello de la audiencia. De pronto, un solo de guitarra nos dejó sordos a todos.
Luego supe de una canción que aparecía en una viñeta de la radio nacional Doble SS. La odié, porque me aturdía escuchar la intro cada 20 minutos. Una tarde pude ver el video, se llamaba Jump. Me encantó la energía que transmitía la banda, y el carisma y la velocidad de Eddie para tocar.
Aún me causa gracia la mención que hacen de él en Bill & Ted’s Excellent Adventure, al querer reclutarlo para formar una banda de rock que salvará a la humanidad. Siempre tuve la expectativa que saldría en la película, pero todo quedó en broma.
Es un poco complicado desligar a Van Halen del hair metal de los 1980, pero esta banda era diferente y lo que la separaba era Eddie. Su virtuosismo no tenía parangón. Era potente, abrasador y veloz. Después supe que había inventado el tapping, que consiste en tocar la guitarra con las dos manos en el mástil, y de ahí su velocidad. Ya había visto esa técnica en Ace Frehley, de Kiss; Jimmy Page, Jimmy Hendrix, Brian May y Kirk Hammett, pero fue Eddie quien, por la pobreza y carencia de pedales y distorsionador, se las tuvo que ingeniar para buscar su sonido; y lo logró.
Eddie tuvo una gran influencia en los guitarristas de los 1980. Todos querían sonar como él. Se convirtió en el Guitar Hero de aquella década. Van Halen, con David Lee Roth y luego Sammy Hagar como vocalistas, perpetuaron la banda para convertirla en un referente dentro del mundo del rock. Ningún grupo suena como ellos.
Tengo que reconocer que mi canción favorita de Van Halen es con Sammy Hagar, y es Right now. Es un tema que al igual que su video siguen vigentes. La letra intenta encapsular en un momento todo lo que sucede, al ritmo de una batería pesada y un solo estridente, desesperado y armónico.
Al final, Van Halen fue una banda que luchó mucho para afianzarse en el Salón de la Fama del Rock. Las peleas de los vocalistas Lee Roth y Hagar con los hermanos Eddie y Alex provocaron episodios realmente lamentables, así como el despido de Michael Anthony. Con todo ese ruido me fue fácil ponerlos a un lado, pero no olvidarlos.
Anteayer, 6 de octubre de 2020, Eddie perdió la batalla contra el cáncer. Es difícil encontrar a alguien de su tamaño que tenga alguna incidencia en la música actual. Es duro pensar que cada vez que muere un músico o un artista que admiramos nos quedamos huérfanos. Por lo que valga y lo que signifique gracias por tanto, Eddie.