Esta semana se fue uno de los grandes del cómic francés, Albert Uderzo (1927-2020), un dibujante de alta categoría conocido principalmente por ser uno de los creadores del personaje Astérix, junto con el escritor René Goscinny.
Nacido en Francia y de padres inmigrantes italianos, su infancia no fue fácil, pues sufrió de constante discriminación a manos de franceses que resentían las acciones de Mussolini en la Guerra Civil Española. Estudiar no le resultó sencillo, y la única asignatura con la que no tenía problema era el arte, para el cual demostró poseer amplio talento. A pesar de ello, Uderzo no consideró el dibujo como una profesión sino hasta mucho después, cuando entró en contacto con los cómics y las películas animadas americanas, especialmente el trabajo temprano de Walt Disney.
Después de la Segunda Guerra Mundial comenzó una exitosa carrera como dibujante en París, creando personajes como Flamberge y Clopinard, un hombrecillo de una sola pierna que siempre triunfa contra todo pronóstico. Entre 1947 y 1948 crea otros cómics, como Belloy y Arys Buck. En 1950 dibujó varios episodios del personaje de origen británico Capitán Marvel Jr. para la revista Bravo!
Luego de unos cuantos años de otras creaciones y viajes, conoció a René Goscinny, en 1951, haciéndose amigos rápidamente. El dúo creativo trabajó en la recientemente inaugurada sucursal parisiense de la compañía belga World Press en 1952. Su primera creación fue Jehan Pistolet. En 1958 comienza su trabajo en Oumpah-pah (que duraría hasta 1962), así como algunas otras series. En 1959, Goscinny y Uderzo se convierten en editor y director artístico, respectivamente, de la nueva revista Pilote, dirigida a niños mayores. En el primer número aparecía por primera vez Astérix en el mercado francés, siendo un inmediato éxito.
Inicialmente se trata de un serial más dentro de Pilote, pero en 1961 se publicó el primer álbum autónomo, Astérix le gaulois. Para 1967, el cómic se había hecho tan popular que sus autores decidieron dedicarse en exclusiva a él, produciendo dos álbumes al año. Tras la muerte de Goscinny, en 1977, Uderzo se encargó del guion, lo que hizo que la producción se hiciera mucho más lenta, produciendo un álbum cada cuatro años. A pesar de la ausencia de Goscinny, todos los tomos siguieron incluyendo su nombre en la portada.
Sus últimos años tuvieron disgustos de índole económica, con agrios enfrentamientos legales con su hija y yerno, sobre la administración de su fortuna, aunque finalmente se alcanzó una reconciliación. Uderzo vendió su parte de Astérix a la editorial Hachette Livre, la cual se encargará de mantener vivo al personaje galo y a sus amigos.