Euda Morales
La posibilidad de envasar frutas, vegetales, salsas y más, permite tenerlos a disposición en cualquier momento. El envasado, por tanto, más allá de una técnica de antaño, sigue estando vigente y ayuda a preparar por lotes; es decir, se aprovecha cuando algún ingrediente es de temporada o barato y se compra al por mayor, como podrían ser los tomates para elaborar una salsa base de tomate y envasarla. Es decir, una salsa de tomate que podrá condimentar en su momento y de acuerdo a la receta con las hierbas de su elección o tenerla ya con los sabores esperados como laurel, tomillo, orégano, albahaca, entre otros condimentos.
Esta misma salsa se podría congelar, aunque el encanto de tenerla a temperatura ambiente en un frasco hermético que únicamente requiere abrirlo antes de su uso es diferente. Los tomates son deliciosos y útiles en infinidad de recetas, enteros, mitades o picados, con o sin cáscara; cuando se requiere hervir agua, hacerle un corte en X en la base, sumergirlos durante 10 a 20 segundos, lo suficiente para aflojarles la cáscara. Se retiran del agua inmediatamente, se colocan por unos segundos en agua de hielo, para proceder a remover la cáscara, corte por la mitad, elimine las semillas, podría también cortar en cubos. Esta técnica de blanqueado, conocida como concassé, es el inicio de preparación de la materia prima, en este caso puntual de los tomates para proceder a envasar nuestros tomates.
Es importante seguir algunos pasos clave, empezando con los frascos a emplear. Estos deben estilizarse, para garantizar su inocuidad. El primer paso es lavarlos y hervirlos durante más de 10 minutos. Para extraerlos de la olla, utilice unas con pinzas, se colocan sobre una mesa de trabajo y estarán listos para llenarlos con nuestra creación culinaria.
Es importante seguir algunos pasos clave, empezando con los frascos a emplear.
Al estar llenos y cerrados, se regresan a la olla, se colocan preferentemente sobre una parrilla, se vierte suficiente agua para cubrirlos, se deberán hervir siguiendo el tiempo indicado en la receta. Posteriormente, se apaga el fuego y se dejan durante una hora en la olla para permitir que se enfríen completamente. Mientras tanto podrá escuchar el sonido que indica que cada tapadera ha sellado perfectamente. Será necesario revisar y si alguna tapadera no hubiera sellado, podrá colocar el frasco en la refrigeradora y consumir en menos de una semana. El siguiente paso será etiquetar los frascos, almacenarlos en un lugar fresco y oscuro durante un máximo de 6 meses. Al abrir el frasco, le durará por una semana en refrigeración.
Además de los tomates, podrá envasar diversidad de vegetales encurtidos como pepinillos, coliflor, zanahoria, etc. Los hongos, como los champiñones, son un excelente ejemplo de conservación, porque cuando están frescos tienen una vida útil corta. Generalmente, al estar de temporada, también son más baratos y motiva a comprarlos. De manera que, si los tiene envasados, podrá adicionarlos a sus recetas y disfrutarlos en cualquier momento.