Con el objetivo de fortalecer la transparencia en la ejecución de los recursos de los programas que impulsa la Secretaria de Bienestar Social de la Presidencia (SBS) en favor de las niñas, niños y adolescentes, autoridades de la institución y relatores del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, (MNP) se reunieron ayer para conocer los logros 2020 y los retos y planes para 2021 de la institución.
El secretario Francisco Molina informó que en este año se atenderá a aproximadamente 20 mil niños y adolescentes, así como a familias, y se cumplirán las recomendaciones que ha girado el presidente Alejandro Giammattei para reforzar las sedes departamentales con más profesionales.
“Las instituciones que velan por los derechos de los menores tienen puertas abiertas en nuestros programas. Nosotros tenemos la tranquilidad de estar haciendo las cosas con transparencia”, comentó Molina.
Como secretario, Molina tiene la responsabilidad de que cada subsecretario tenga las herramientas necesarias para que desarrolle de mejor manera su trabajo, “por ello en 2020 ejecutamos por primera vez el 95.7% del presupuesto, lo cual es un éxito”, destacó.
Satisfactorio trabajo interinstitucional
Por su parte, el presidente relator del MNP, Otto Paz, resaltó la buena coordinación y labor entre ambas instituciones, lo que ha permitido una efectiva comunicación para avanzar en los convenios suscritos.
“Avanzamos bastante con el convenio y me llenó de satisfacción el trabajo que realizamos en el tema del proceso de adolescentes en conflicto con la Ley Penal. Ahora hay que empezar con el tema del abrigo y protección”, subrayó Paz.
Rendición de cuentas
La subsecretaria de Preservación, Lourdes Isaacs, resaltó que en 2020 entregaron 2 mil 663 bolsas con alimentos a las familias de las niñas, niños y adolescentes atendidos por medio de los distintos programas. También se realizaron guías de juegos y de protocolos de reactivación validados para Covid-19, explicó.
Por aparte, el subsecretario de Protección, Carlos Gómez, habló sobre el plan de trabajo que ha permitido reducir en un 75% el abandono de procesos en las residencias de abrigo, el ahorro anual de Q308 mil en arrendamientos, el cambio de cuatro residencias y el nuevo modelo de atención especializada para niñez y adolescencia migrante no acompañada.
Flor Dolores, subsecretaria de Reinserción, indicó que el trato digno y mejores condiciones han incidido en cero motines en los centros juveniles de privación de libertad. “Con las revisiones se evita la privación de libertad y ahora con el apoyo de la Embajada de Estados Unidos abrimos un área específica para este programa, además hemos acercado a la población el servicio de Medidas Socioeducativas para facilitar los proceso de los jóvenes”, concluyó.