La seguridad ciudadana se ha reforzado con la implementación de operativos conjuntos entre la Policía Nacional Civil (PNC) y el Ejército de Guatemala, como parte de una estrategia interinstitucional que fue anunciada por el titular del Ministerio de Gobernación (Mingob), Francisco Jiménez, y que cuenta con el respaldo constitucional y legal.
La medida, amparada en el Decreto 40-2000, Ley de Apoyo a las Fuerzas de Seguridad Civil, establece que la colaboración entre la PNC y las fuerzas armadas es una alternativa legítima para proteger a los ciudadanos y sus bienes.
El presidente Bernardo Arévalo aclaró las dudas respecto a estos operativos ante las críticas sobre una posible militarización de las acciones de protección ciudadana, y aseguró que la Policía lidera las intervenciones y que la colaboración militar es únicamente de apoyo.
“De ninguna manera hay una militarización, toda vez que la responsabilidad de los operativos continúa en manos de la PNC. Lo que se está haciendo es solicitar al Ministerio de la Defensa que contribuya con elementos para acompañar a los agentes en las tareas”, explicó el mandatario.
¿Qué se busca?
La estrategia, que comenzó el pasado 19 de octubre, prioriza el despliegue de fuerzas de seguridad en áreas metropolitanas y otras zonas de alto riesgo, donde la delincuencia organizada y delitos de alto impacto, como las extorsiones, afectan a la población.
Jiménez añadió que estos patrullajes y puntos de control, que estarán activos hasta fin de año, se enfocan en recuperar territorios, prevenir nuevos hechos de violencia y dar una respuesta rápida al alza de la criminalidad registrada en los últimos meses.
En ese sentido, la vocera del Ministerio de la Defensa Nacional (Mindef), Ann Marie Argueta, recordó que esta colaboración interinstitucional no es una iniciativa reciente y que operativos similares se han llevado a cabo en administraciones pasadas bajo el amparo del Decreto 40-2000, para enfrentar el aumento de delitos.
Además, esta colaboración no implica un incremento en los gastos estatales. “Ningún soldado del Ejército de Guatemala ha recibido o recibe alguna remuneración adicional a su estipendio”, aseguró
Argueta.
Respaldo y confianza
El catedrático y experto en seguridad nacional Mario Mérida, subrayó que la Constitución Política de la República, en su Artículo 244, autoriza al Ejército a garantizar la seguridad interior y exterior del país, lo que respalda legalmente su intervención en operativos de seguridad civil bajo circunstancias específicas.
Mérida explicó que la colaboración entre las fuerzas de seguridad resulta positiva, ya que “el Presidente, como comandante general del Ejército y de las fuerzas públicas, tiene la potestad de utilizar ambas para alcanzar los objetivos de resguardo nacional”.
El experto también destacó que la población en diversas áreas del país percibe al Ejército como una institución confiable y disciplinada.
“Los campesinos del interior han solicitado protección militar para realizar sus actividades, lo que muestra la confianza que existe en las fuerzas armadas para proteger sus comunidades”, comentó Mérida.
Estrategia integral
El gobernante Arévalo enfatizó que los esfuerzos interinstitucionales no solo pretenden reducir la criminalidad, sino también combatir el problema de las extorsiones.
Este fenómeno afecta directamente la calidad de vida de los guatemaltecos, por lo que, según el mandatario, la presencia militar junto con la PNC en las calles es clave para reducir el temor de la población y disuadir la actividad delictiva.