Esta mañana fueron presentados los resultados de las acciones de las instituciones que conforman el Observatorio Nacional sobre Drogas 2017, respecto del combate de las adicciones y el trafico ilícito de estupefacientes en el país, a la vez de que se aseguró que próximamente se ofrecerá una actualizada política para el tratamiento de esta problemática.
Las cifras significativas están vinculadas con la erradicación de sustancias prohibidas, los procesos judiciales por tráfico de estupefacientes y bienes extinguidos al narcotráfico.
Además, se conoció el avance en la preparación de la Política Nacional para el Abordaje de las Drogas y Adicciones, la cual sustituirá a la actual, vigente desde 2009. Esta renovada guía será presentada en la próxima sesión ordinaria de la Comisión contra las Adicciones y el Tráfico Ilícito de Drogas (CCATID).
Rafael Sánchez, secretario ejecutivo de la CCATID, aseguró que “esta es una herramienta que va a permitir hacer comparativos de prevalencia en consumo de distintas sustancias”, entre otras cosas.
Menores de edad son vulnerables
Al respecto, el vicemandatario Jafeth Cabrera precisó que se debe involucrar al Ministerio de Educación para generar una estrategia interinstitucional que permita combatir las adicciones, y así “las niñas, niños y jóvenes no se involucren en las drogas”, sin olvidar que el “tabaco (también) está haciendo daño a la población”.
Algunos de los datos presentados revelan que el año pasado fueron erradicadas 417 millones de matas de amapola y 6 mil 3 de mariguana. También se incautaron 13.6 toneladas de cocaína, 4 mil 400 gramos de crac y 47.94 kilogramos de heroína.
Los bienes incautados al narcotráfico fueron: 295 vehículos, 4 aeronaves, 20 embarcaciones, 172 armas de fuego, 5 mil 475 municiones, 183 tolvas y 6 granadas.
Asimismo, fueron detenidas 3 mil 182 personas por distintos delitos asociados a la producción, venta y consumo de estupefacientes. Se dictaron 763 sentencias por los jueces competentes, de las cuales 711 fueron condenatorias y 52 absolutorias.
Por último, fueron incinerados 15 mil 570 kilogramos de cocaína y mil 216 de mariguana, entre otras sustancias.