Por: Ricardo Rodríguez, analista económico de Agexport
Recientemente se presentó la Primera Encuesta de Percepción Empresarial de 2018, por parte de Cacif, una encuesta que revela la opinión de parte de las mismas empresas sobre distintos factores que impulsan o frenan el desarrollo económico del país y sus expectativas para los próximos meses.
Esta Encuesta presenta una importante radiografía del ámbito empresarial nacional, que vale la pena analizar con detenimiento.
Por un lado, es positivo destacar que la economía guatemalteca ha resistido distintos shocks de inestabilidad, a los que ha sido expuesta en los últimos años.
La mayoría de los empresarios reconoce (al igual que ya lo han hecho agencias de riesgo crediticio y otros organismos internacionales) que la economía se mantendrá estable durante el presente año, lo cual, ante la coyuntura actual, es muy positivo.
Habla bien de un país cuyas acciones en materia de política económica han propiciado que la economía nacional no esté sufriendo reveses de alto impacto. Eso sí, vale la pena contextualizar que esta estabilidad, si bien positiva, queda corta ante las múltiples necesidades del país. Además de una economía estable, mayores niveles de dinamismo son vitales para Guatemala. Por el otro lado, la materia pendiente. La encuesta indica que uno de los principales factores que afectan al país es la corrupción.
Esto también es uno de los tres problemas principales para Guatemala, según el Índice de Competitividad Global del Foro Económico Mundial.
Sin lugar a dudas, han sucedido avances importantes en los últimos años. Sin embargo, se necesitan aún reformas importantes de mediano y largo plazo que mejoren el clima mediante el cual el sector empresarial se desarrolla.
Sumado a esto, se debe dar atención prioritaria a otros factores de igual forma importantes: se enumeran la delincuencia y criminalidad, pobreza, entre otros, a los que Guatemala debe prestarle atención urgentemente. La clave para el progreso económico de Guatemala pasa claramente por potenciar las oportunidades de generación de empleos en el país.
Las acciones mencionadas acá podrían servir de punto de partida para generar un ambiente más propicio para que la economía nacional vuelva a despegar.