Desde que fue lanzada, el año pasado, la Estrategia Nacional de Prevención de la Violencia y el Delito 2017-2027, se sabía que había mucho trabajo por hacer para alcanzar los objetivos.
Por ello, es satisfactorio conocer que una de las acciones que contemplan la Estrategia va por buen rumbo.
Al respecto, la semana pasada se realizó el I Encuentro de Prevención de la Violencia y el Delito, donde los participantes destacados eran alcaldes de diversos municipios del país.
El tema central del Encuentro fue El rol de los Alcaldes en la agenda de seguridad ciudadana, en la implementación de iniciativas locales.
El objetivo del evento fue el intercambio de experiencias sobre los problemas que aquejan a los municipios, donde coincidieron en varios temas, como la necesidad de luminarias en lugares estratégicos, fomentar las artes y la música, recuperar la educación vespertina en escuelas e institutos, erradicar el trabajo infantil, entre otros.
Asimismo, es relevante que a partir del encuentro se acordara formar mesas técnicas de trabajo, las cuales buscarán la implementación de iniciativas de prevención de la violencia y el delito a nivel de gobierno local.
En el primer encuentro participaron diferentes municipios de Guatemala, Quetzaltenango, San Marcos, Huehuetenango, Alta Verapaz, Zacapa, Chiquimula, Izabal, Quiché, Escuintla, Chimaltenango, Sacatepéquez y Retalhuleu, reuniendo un total de 25 alcaldes. Lo cual resulta positivo porque se ha dado espacio a las autoridades locales de territorios donde la incidencia delictiva es alta en la mayoría de casos; por ejemplo, Guatemala, Escuintla y Quetzaltenango.
Además, el evento es relevante porque se traduce en uno de los primeros espacios donde convergen el poder central y el poder local para tratar el fenómeno delictivo, la prevención de la violencia, desarrollo social, y otros temas que están concatenados. Lo anterior es una muestra de que cada vez se entiende que la seguridad no es responsabilidad solo del gobierno central.
Lo decía en la pasada oportunidad, y lo repito: todos los actores de la sociedad tenemos un rol importante en el tema de seguridad, y el hecho de ver a jefes ediles involucrarse de lleno es esperanzador. Lo importante es darle continuidad, que trascienda gobiernos; un instrumento estatal donde las acciones no se vean limitadas a cuatro años.