La Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó que América está libre de la enfermedad de tétano materno y neonatal, el cual en su momento causó la muerte de no menos de 10 mil recién nacidos al año.
“Esto constituye otra prueba de que las vacunas funcionan y salvan la vida de innumerables madres y bebés. Sigamos protegiendo a las personas de nuestra región e invirtiendo en programas nacionales de vacunación fuertes y capaces de inmunizar a todas las personas y de detectar con rapidez las enfermedades prevenibles”, señaló Carissa F. Etienne, directora de la OPS.
Esta es la sexta enfermedad prevenible mediante vacunación que se elimina en la región después de la viruela, la poliomielitis, la rubéola, el síndrome de la rubéola congénita y el sarampión.
El tétanos no puede erradicarse plenamente porque la bacteria que causa la enfermedad se encuentra en todo el ambiente, el suelo y las heces de muchos animales. A diferencia de otras enfermedades prevenibles mediante vacunación, el tétanos materno y neonatal se considera eliminado, cuando la tasa anual es de menos de 1 caso por cada mil nacidos vivos a nivel distrital.
La enfermedad se presenta por lo general cuando el muñón umbilical del recién nacido, aún sin cicatrizar, se infecta con la bacteria C. tetani, debido a que el instrumento usado para cortar el cordón umbilical no es estéril, la superficie donde nace el bebé está sucia, las manos de quien asiste en el parto no están desinfectadas o se le aplican sustancias tradicionales nocivas. Este mal es mortal porque causa una parálisis que impide al bebé respirar y amamantarse.
La OPS pidió a todos los países de la región intensificar sus esfuerzos para mantener en un 95 por ciento la cobertura de la vacunación materna contra el tétanos, acorde con lo recomendado, ya que varios no han cumplido con este nivel en los últimos años.