Foto: PNC
La División Nacional contra el Desarrollo Criminal de las Pandillas (Dipanda), de la Policía Nacional Civil (PNC), habilitó una sede en Sanarate, El Progreso, lo que permitirá a las fuerzas de seguridad tener mayor presencia en diferentes zonas del país y más capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia.
La referida institución es pieza clave en la lucha contra el crimen organizado. Gracias a su labor, se han desmantelado varias estructuras criminales que se dedicaban a la extorsión, sicariato y otros delitos.
La nueva oficina contará con 16 agentes especializados, quienes trabajarán por garantizar el resguardo de los ciudadanos, especialmente en aquellos lugares donde las maras tienen presencia. Su tarea será identificar, investigar y desarticular estos grupos delincuenciales que han causado estragos en distintos barrios y comunidades.