Con un golpe a la nostalgia ochentera y una gran trama, ocho capítulos fueron suficientes para que en 2016 Stranger Things conquistara a suscriptores y crítica. La espera, de 15 meses y 12 días, se ha hecho larga para los seguidores, pero finalmente hoy la segunda temporada está disponible en la plataforma Netflix. Antes de devorar como Demogorgon los 9 episodios, estos son algunos datos que debería conocer:
- Hawkins reabre sus puertas: después de los acontecimientos de la primera temporada, los habitantes de Hawkins, Indiana, tratan de recuperar la tranquilidad. Pero, aunque Will (Noah Schnapp) ha vuelto, una nueva y poderosa amenaza planea sobre el pueblo.
- Eleven rregresa: aunque al final de la primera temporada, Eleven (Milly Bobbie Brown) se sacrificó por sus amigos y se sumergió en El otro lado, los tráiler ya han dejado ver que está de regreso. Nuevas aventuras le deparan a esta amante de los waffles, a la que ya le ha crecido el cabello, y una de ellas podría ser su reencuentro con Mike (Finn Wolfhard).
- Joyce sigue de pie: el año pasado fue imposible no conmoverse con Joyce (Winona Ryder), esa madre coraje que compró todas las luces navideñas del supermercado (y una cajetilla de Camel) para comunicarse con su hijo desaparecido. Pues bien, los avances han demostrado que su pelea no se detendrá en esta nueva etapa y ahora se enfrenta a un grupo de científicos.
- Nuevos personajes: aunque está confirmado que no veremos nada de Barb (Shannon Purser), nuevos personajes hacen su aparición. Entre estos destacan Roman, una mujer que sufrió una gran pérdida durante la infancia; Bob, un compañero de escuela de Joyce y Hopper; y el Doctor Owens, un nuevo villano que intentará “limpiar” los hechos del último año.
- ¿Más es mejor?: en cuanto a presupuesto Stranger Things 1 no escatimó, con un US $6 millones (Q44 millones) por episodio. Sin embargo, en la segunda temporada el costo fue de US $8 millones (Q58.7 millones) por capítulo. Este detalle, para bien o para mal, la pone en igualdad de condiciones con la gran reina de la televisión: Game of thrones. ¿Esta vez sí la veremos arrasar en las entregas de premios?