A pocos días para emprender el viaje a Ecuador, el equipo femenino de tenis que nos representará en la Copa Billie Jean King (BJK) trabaja a toda marcha en las canchas de la Federación Nacional de Tenis.
Capitaneadas por el histórico entrenador Anthony Vásquez, Andrea Weedon, Melissa Morales y Gabriela Rivera se enfocan en su juego, ahora que conocen a los rivales que deberán enfrentar, primero, en busca de un ascenso histórico al Grupo Mundial y, segundo, conservar el lugar en el Grupo I de América.
A Guatemala el sorteo pareció no favorecerle, pues en la siguiente eliminatoria deberá enfrentarse a Brasil, de Beatriz Haddad Maia; a Argentina, de Paula Ormaechea, y a Colombia, de Camila Osorio, todas figuras del circuito mundial y acostumbradas a enfrentar a las principales potencias del globo.
Osorio ganó este año el Abierto de Monterrey y se catapultó al puesto 34 del ranquin mundial, y esta semana jugará un último certamen preparatorio, en Bogotá. Su mayor cantidad de triunfos en la Copa BJK ha sido en tierra batida y el torneo irá en cancha dura.
La paulista Haddad Maia viene de vencer a la griega Maria Sakkari en el Masters de Miami. La número 62 en el escalafón mundial llega más que motivada a esta ronda, previo a la parada en Bogotá.
Ormaechea es una veterana (158 del mundo) con experiencia de 13 años en la Copa y, a sus 30, espera guiar a su Selección a un ascenso al Grupo Mundial. Hoy jugará contra la griega Irina Bara, en Bogotá.
Esas son las principales raquetas de los equipos que las chapinas deberán enfrentar, pero eso no las hace menos y se han preparado para dar lo mejor en cada punto sobre la cancha.
Weedon, quien ha conformado la Selección desde 2009, es la principal raqueta guatemalteca, además ostenta la mayor cantidad de triunfos (37) en el certamen, entre individuales y dobles. De estos, 11 fueron en tierra y 16 en cancha dura.
La mancuerna de Weedon es Morales. La escuintleca debutó en 2008 y acumula 23 victorias. Su posición 1 299 en el ranquin mundial podrá no impresionar a las rivales, pero si logra forzar a definir la serie en el punto de dobles, podría poner contra las cuerdas a cualquiera.
Rivera, por su parte, es la más joven del equipo y con 20 años aporta una frescura distinta. Ha enfrentado a la mayoría de rivales en las categorías inferiores, y para la exjugadora de Grand Slam juvenil la palabra miedo no está en su vocabulario. Está posicionada 1042 del mundo y 3 de sus 5 triunfos en la Copa han sido en cancha dura.
“Para nosotras es un reto ir a esta Copa, queremos ver hasta dónde podemos pelear contra ellas y, si podemos ganarles, lo haremos”, dijo Weedon.
“Vamos a jugar a nivel del mar en una cancha dura, que nos conviene, y estaremos unos días antes para aclimatarnos. Sabemos que son rivales fuertes, pero es a lo que toca enfrentarnos en este nivel”, añadió Morales.
“Para nosotras como mujeres jugar esta Copa es el mayor privilegio que puede haber. Ahora que nos pusimos el uniforme, ya me siento en Ecuador y estoy emocionada de jugar por Guatemala. Para nosotras no hay imposibles, y vamos a luchar hasta el último momento”, refrendó Rivera.