Redacción deportes, EFE.- La selección de Suecia, plagada de suplentes, sacó
adelante el encuentro amistoso contra Estonia (1-0), en el duelo que completó
la relación de compromisos internacionales de ambos equipos.
El preparador sueco Janne Anderson, que forma parte del Grupo B de la fase de
clasificación para el Mundial de Qatar 2022, puso en escena un once que nada
tenía que ver respecto a los choque oficiales que previamente había disputado.
No jugaron ni Zlatan Ibrahimovic, del Milán, ni el delantero de la Real
Sociedad Alexander Isak, ni Emil Forsberg, del Leipzig, ni Sebastian Larsson,
entre otros.
De hecho, respecto al partido contra Kosovo, el último de la fase
clasificatoria, solo jugó Victor Lindelof.
Fue el veterano Marcus Berg, actualmente en el Krasnodar ruso, el que
desequilibró el partido. Bastó con el gol que marcó a los cuatro minutos, a
pase de Robin Quaison.
Con ese tanto le fue suficiente a Suecia para mantener su racha victoriosa y
completar su calendario con una nueva victoria después de las logradas sobre el
combinado kosovar (0-3) y Georgia (1-0) que mantiene al cuadro de Anderson en
la cima del grupo del que también forman parte España y Grecia.
Estonia, por su parte, se marchó con una derrota por la mínima después de los varapalos
sufridos contra Bielorrusia (4-2) y la República Checa (2-6) en sus compromisos
de la fase de clasificación. El equipo de Martin Reim forma parte del Grupo E junto
a Bélgica y Gales.