El petenero viajará a Cancún la próxima semana.
El viernes 26 del presente mes se llevará a cabo una velada pugilística internacional en Cancún, México, donde participarán los guatemaltecos Léster Martínez y Pablo el Cherokee Macario.
Macario expondrá el título de Campeón Mundial Juvenil Plata del Consejo Mundial de Boxeo, en un combate a 10 asaltos contra el mexicano Héctor Rivera (2-6-0).
Mientras, en el evento estelar peleará Martínez, actual Campeón Latinoamericano, quien espera ganarse la simpatía del público mexicano, además del respeto de los críticos experimentados de esa región del país azteca y alcanzar una nueva victoria en el ámbito internacional mientras prepara el camino rumbo a los Juegos Olímpicos de Tokio.
El rival de Léster será el mexicano de 34 años Juan Sergio el Castor Torres (8-9-0).
Martínez, quien se entrena bajo las órdenes de Héctor Arreola en la Escuela Profesional de Boxeo CDA, con sede en Hermosillo, Sonora, México, se unirá en marzo a la disciplina de la Selección Nacional, que se prepara con miras a la clasificación olímpica.
“La preparación nunca se deja de trabajar, y al enterarme de que posiblemente tendría una pelea en febrero, se aumentó la carga más o menos desde principios de enero, pues las fiestas las había pasado con mi familia en un descanso activo, así que cuando me confirmaron la pelea para el 26 de este mes, yo ya venía encarrilado”, contó Martínez.
“La pelea va a ser en Cancún, Quintana Roo. Había peleado anteriormente en Hermosillo, Sonora, pero ahora voy a estar más cerca del país, aunque siempre en México”, explicó el pugilista, cuyo próximo combate será en el Windham Garden de las paradisíacas playas de Cancún.
“Gracias a Dios, mis peleas anteriores pude terminarlas en el primer episodio, pero eso no quiere decir que yo me haya preparado solo para eso. Quizá en las peleas se pueda ver fácil, pero detrás de eso hay una preparación que me deja agotado, así que yo siempre voy listo para pelear hasta 10 asaltos si fuera necesario”, añadió.
Se mantiene el sueño
“Participar en Juegos Olímpicos es uno de mis sueños, y ahora que se abrió la puerta para los profesionales mantengo viva la ilusión. Yo sé que no es fácil, pero tampoco es imposible, y solo faltan algunos detalles que afinar con la Federación”, reflexionó Martínez. “Ya tuve dos oportunidades de clasificar: en la primera perdí en la segunda pelea, y en la siguiente clasificación me quedé a un punto de poder ir. Ahora trataré de que la tercera sea la vencida, y voy a dar el todo por el todo para estar allá representando a Guatemala”, confesó el campeón latinoamericano.
El certamen preolímpico está programado para mayo y la sede será en Argentina.
“Una de las principales diferencias entre el boxeo profesional y el olímpico es el tiempo de entrenamiento, pues ahora se ha incrementado la cantidad de horas de práctica, además, los guantes son más livianos, ahora uso de 10 onzas (antes usaba de 12). En el olímpico se califica la técnica de los golpes, mientras que en el profesional se trata de hacer daño al rival”, explicó el boxeador.
“Si logro clasificarme para Tokio, no será sino hasta después de los Juegos que vuelva a mi preparación como boxeador profesional y buscar siempre mantenerme en actividad”, aclaró el petenero.
Para Martínez, estar en las justas olímpicas representa una vitrina por medio de la cual pueden llegar futuros contratos contra boxeadores de jerarquía.