Manchester, EFE.- Imperdonables, flagrantes y sentenciadores. Dos errores
de un titubeante Raphael Varane condenaron al Real Madrid (2-1), que terminó de
entregar la eliminatoria a un Manchester City que por fin consigue su gran
triunfo europeo (4-2 en el global).
Los de Pep Guardiola desangraron a un
temeroso Real Madrid que llegó a estar a un gol de la prórroga con el 1-1, pero
que se marchó a casa por los errores en defensa de un errático Varane, quien
echó de menos tener a Sergio Ramos (suspendido) a su lado.
Los nervios, siempre cruciales en estos duelos y en otras ocasiones verdugos
del City, traicionaron al Madrid, que pecó en eso en lo que Rodrigo los ponía
como favoritos, en experiencia y mentalidad. A los nueve minutos, la presión
alta de Guardiola dio sus frutos y Varane se hizo un lío. Gabriel Jesús le Robó
la cartera y asistió a placer a Sterling, que solo tuvo que empujarla.
Las dudas atenazaban a un Madrid que recibía los gritos desde la grada de un
enchufadísimo Sergio Ramos. El escenario se ponía perfecto para la posesión infernal
del City, pero el Madrid supo responder.
Tiró de la garra de antaño y se introdujo en las pocas rendijas que dejaron
abiertas los de Guardiola. La tuvo primero Benzema en una ocasión clarísima,
solo delante de Ederson, pero en la que tiró al muñeco.
La segunda del francés ya no se perdonó. Rodrygo dejó clavado a Joao Cancelo y
puso un centro medido desde la línea de fondo para que lo picara a las redes
Benzema.
El Madrid se siguió acercando, pero el verdadero peligro lo llevó a la meta de
Courtois el City, sobre todo con los disparos de Sterling y Cancelo. El belga
estuvo resolutivo y evitó un descalabro antes del descanso.
A la vuelta de vestuarios, el City salió convencido de ir a buscar al Madrid.
Comandados por un genial Kevin De Bruyne que se consolida como el mejor
mediapunta de Europa, los sky blues
comenzaron a cimentar el segundo.
La rozó Sterling, quien luego de un pase magistral del belga, rompiendo dos
líneas, se encontró en el mano a mano con la yema de los dedos de Courtois.
El City estaba mucho mejor, pero no mataba, lo que ya lo había echado de esta
competición en el pasado. Su capacidad para dominar se quedaba muy por encima
de sus habilidades para competir y el Madrid, con muy poco, siempre daba
sensación de peligro. Benzema atisbó la machada, pero con dos disparos lejanos
no superó a Ederson.
Más clara la tuvo Gabriel Jesús, a quien solo delante de Courtois se le hizo de
noche; y se encontró con otra manopla salvadora del belga.
Al City le faltaba una chispa arriba y Varane se la volvió a regalar. En un
balón largo, cómodo para el francés, intentó cedérsela a Courtois, pero se
quedó corto. Gabriel Jesús se anticipó y superó al belga, implosionando al
Madrid.
Un mazazo, porque los blancos se acababan de pegar el tiro en el pie que daba alas
al aspirante. La suerte que hace falta para ganar la Champions esta vez se
alineó con el que no vestía el escudo del Real Madrid.
El City dio el puñetazo en la mesa que tanto llevaban esperando los de
Guardiola. Su gran noche en Europa ante un Real Madrid que confirma el cambio
de guardia en el Viejo Continente.
Serán los sky Blues los que marchen a
los cuartos de final de Lisboa. Los de Zidane se van de vacaciones.