Las actuales contrataciones de extranjeros pierden fuerza en el futbol nacional.
El futbol nacional, tradicionalmente más un importador que exportador de jugadores, parece haberse acomodado a recibir a los de tercera línea de países que antes proveían a sus seleccionados nacionales para venir a nuestra liga.
Lejos han quedado nombres de algunas estrellas que otrora pisaron las canchas de nuestra liga y engalanaron un futbol que todavía se jugaba con estadios abarrotados, pues el interés de ver futbol de calidad hacía que los recintos se pintaran de colores.
Contrataciones como la de Héctor el Bambino Veira, José Emilio Mitrovich, Caetano Wagner, Antonio Martins Toninho Dos Santos, o Alberto Vanderkam, entre las décadas del 60 y 70, han dejado de darse paulatinamente.
Habría que remontarse hasta la década del 90, cuando los cremas conformaron aquella “selección centroamericana” encabezada por Rolando Fonseca, Milton Tyson Núñez y Nicolás Suazo, y poco después el surgimiento del paraguayo Carlos González, quien defendió los colores de su selección. Sin olvidar a Damián Macaluso, campeón con Cobán, ni a Diego Latorre, quien hizo monarca a los cremas, pero de esto último han
pasado casi 2 décadas.
Desde entonces han sido puros golpes de suerte, monedas lanzadas al aire por jugadores que han resultado gratas sorpresas, como los mexicanos Carlos Kamiani Félix y Agustín Herrera, en su momento el panameño Jaime Penedo o el argentino Alejandro Gambetita Díaz, quienes se han convertido en monedas de cambio y solo rotan entre equipos, que optan por el reciclaje en lugar de aventurarse a buscar nuevos talentos que aporten a nuestro balompié, cada vez más golpeado.
La crisis es notoria, y es que vemos las contrataciones de los equipos que buscan conquistar la Liga Nacional, y solo hay más de lo mismo, sin fichajes “bomba”, que llamen la atención de los medios, y menos del aficionado que sigue con la sequía de balompié de calidad.
Municipal contrató al portero uruguayo, naturalizado salvadoreño, Rafael García; Cobán trajo al mediocampista argentino Marcelo Vidal; Xelajú todavía no concreta al guardameta canadiense David Monsalve, y Antigua movió fichas en México para traer a Giovanni Hernández y Juan Miguel Basulto Medina, de la disuelta liga de ascenso. Comunicaciones, lejos de sumar, restó, pues prescindió de los servicios de Justin Daly, un futbolista con proyección.
Lo cierto es que se extrañan los tiempos cuando Carlos Campazzo, Omar Muracco, Nilmo Edwards, Omar Sansogni o el gran Santiago Ostolaza engalanaron nuestros terrenos de juego.
