San Sebastián, EFE.- Osasuna de Pamplona quebró este domingo la racha de
siete victorias seguidas en casa de una Real Sociedad de San Sebastián a la que
le pasó factura el parón, pero que salvó un punto en su lucha por la Liga de
Campeones.
El equipo local estuvo desconocido en la primera mitad, a merced de un Osasuna
ambicioso que con una línea defensiva de cinco hombres cerró todas las entradas
a la portería de Rubén durante este período.
Jagoba Arrasate, técnico de Osasuna, conoce perfectamente el juego de la Real y
a la mayoría de sus jugadores, planteó un partido, como había previsto el
entrenador local Imanol alguacil, con las líneas muy adelantadas, presionando
la salida de balón de una defensa realista espesa en este apartado, en el que
se notó el período de inactividad de su plantilla.
Una de las mejores ocasiones de los realistas y casi la única en los primeros
45 minutos llegaría en una jugada de tiralíneas habitual de los blanquiazules
esta temporada, conducida por Zaldúa y que Unai abortó con el peligro acechando
la portería rojilla.
Ahí se le acabó la energía a una Real que sufría en las llegadas constantes de
los pamploneses, como una que desembocó en una combinación de Estupiñán con
Adrián, que Le Normand envió a córner en el último momento.
Osasuna encontraría el premio a su buen trabajo a la media hora cuando el
francés Le Normand tocó con su brazo un balón dentro del área que el árbitro no
dudó en sancionar con penal, pena máxima que Adrián convirtió con precisión
evitando la estirada de Remiro. El guardameta de la Real volvió a sufrir el
tiempo de descuento con otro disparo de Íñigo Pérez que se marchó cerca del
larguero.
Los navarros no bajaron su nivel después de la reanudación, sufrieron primero
en un mano a mano de Oyarzabal frente a Rubén, invalidada por fuera de juego
del realista y estuvieron cerca de lograr el segundo en el minuto 50 con un
remate de Marc Cardona cerca del poste.
La Real reaccionó aprovechando el desgaste de un generoso Osasuna y llegó el
empate, obra de Oyarzabal, bien en la definición frente a Rubén, aunque el
mérito de la jugada fue una espectacular galopada de Willian José para asistir
al eibarrés antes de dejar el terreno de juego sustituido por Isak.
El factor físico hizo mella en ambos equipos en el tramo final del partido, el
ritmo bajó notablemente y el empate les pareció bueno a ambos equipos aunque
Osasuna se guardó un último cartucho con Darko en los instantes finales que
Remiro hizo que no llegara a ser el tanto del triunfo osasunista con una gran
estirada. Darko Brasanac la volvió a tener en el tiempo de descuento pero el
empate estaba sellado.