Minneapolis, EFE.- La fase de ruedas de prensa de los jugadores con los periodistas llegaron este martes a su final con un cansancio admitido por parte de los profesionales de los Patriots de Nueva Inglaterra y los Eagles de Filadelfia al considerar que después de la reunión del lunes en la Noche de Apertura todo estaba dicho por su parte de cara a la 52 edición del Super Bowl.
Las únicas novedades de lo dicho la noche anterior con la rueda de prensa de este día celebrada en el centro comercial Mall of America fueron las lágrimas que derramó el mariscal de campo de los Eagles de Filadelfia, Nick Foles, quien se emocionó cuando habló sobre la presencia de su familia en el U.S. Bank Stadium, donde el domingo disputará el partido por el trofeo Vince Lombardi.
“Tener a mi hija y esposa en Minneapolis para el partido es la cosa más grande que me ha sucedido”, declaró Foles. “Mi familia ha sido la cosa más importante que he tenido en este viaje, sin su apoyo, yo no estaría aquí. Pensar en mi hija, en ser padre y un buen esposo me da esa energía extra para seguir. Mi hija crecerá y quiero que se sienta orgullosa de su padre”.
También el legendario mariscal de campo de los Patriots, Tom Brady, habló de su familia y lo difícil que es compaginar su pasión por el deporte y la familia, pero que acepta esa “demanda” de dividirse entre ambas pasiones y espera que por lo menos pueda hacerlo por tres temporadas más.
En este sentido dejó abierta la posibilidad de inclusive jugar con los Raiders cuando estos se hayan mudado en 2020 a Las Vegas, dado que es un lugar donde le gustaría competir, aunque reiteró que también tiene la responsabilidad de pasar más tiempo con la familia.
También habló de la lesión de su mano derecha y explicó cómo va la recuperación, que mejora, pero todavía no se encuentra como desearía, pero que es optimista y solo espera que esté lo mejor posible para el domingo cuando se enfrente a los Eagles.
El resto de los jugadores de los Patriots ocuparon una vez más un lugar secundario en la rueda de prensa y de ahí que el receptor abierto Danny Amendola, admitiera que no había nada nuevo que decir, pero que entendía que las ruedas de prensa formaba parte de la semana del Super Bowl.
“Estamos cansados, deseamos centrarnos ya en todo lo relacionado con el partido”, señaló Amendola.
A partir de este miércoles, ambos equipos, que han tenido también entrenamiento el lunes y hoy, se centrarán por completo en la preparación del partido del domingo.
Los que no cambian de actitud hacia los jugadores de los Eagles son los seguidores del equipo local de los Vikings de Minnesota, que por la eliminación que sufrieron en Filadelfia, en la final de la Conferencia Nacional (NFC) los han considerado como el enemigo a batir y por lo tanto su apoyo completo es para los Patriots, a los que ven como sus aliados para vengarse deportivamente.