En una fuente de empleo e ingresos se ha convertido un proyecto de apicultura que está siendo implementado en 12 municipios localizados a lo largo de la cuenca del río Nahualate.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo es el responsable de poner en marcha esta iniciativa, mientras que el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales es el encargado de ejecutarlo, con recursos del Fondo de Adaptación al Cambio Climático.
Manuela Leticia Choc López, de 21 años, quien junto a su hija padeció la muerte de su esposo hace 1 año, es una de las beneficiarias de este programa, que coordina el trabajo de agricultores y organizaciones locales para apoyar la producción de miel y la economía local.
“La primera vez que fui a un colmenar fue una experiencia inolvidable. ¡Me picó una abeja y no supe qué hacer!”, recordó Choc López, que en la actualidad tiene 12 colmenas.
El inicio
Esta productora aprendió este oficio en la Cooperativa Nahualá, qué resolvió dedicarse a la apicultura para diversificar sus ingresos y fortalecer su seguridad alimentaria, después de que la roya afectara la siembra de café de sus agremiados.
“Cuando no existían las abejas, los cafetales no tenían muchas flores. Pero ahora, mediante la polinización que hacen las abejitas, estamos viendo un gran resultado de nuestros cafetales y de todos los árboles que están cerca del apiario”, comentó.
Cadena productiva
De acuerdo con estadísticas de la Asociación Guatemalteca de Exportadores, el sector apícola cuenta con 4 mil productores y 25 mil personas vinculadas a la cadena de valor de la miel de abejas, con un total de 120 mil colmenas.