Las buenas prácticas en la producción, las oportunidades de mercado y el consumo de aguacate son parte de las conferencias en el sexto Congreso Latinoamericano de Aguacate, que se inició ayer en Antigua Guatemala, Sacatepéquez, que reúne por tres días a expertos y productores de la región.
Uno de los principales resultados que se esperan de la cita, organizada por la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), es la transferencia tecnológica y de prácticas, para que los productores locales obtengan un impacto en el rendimiento del cultivo del referido fruto, tanto en volumen como en calidad.
En la inauguración, el ministro de Economía, Antonio Malouf, animó a los empresarios, productores y comercializadores que apuestan a la industria del aguacate, la cual considera que tiene gran potencial de crecimiento al incorporarse en su producción la tecnología y la
innovación.
13 000
empleos directos genera la producción de este fruto.
En 2020, Guatemala exportó 145 000 toneladas de Aguacate a Centroamérica, Europa, Canadá y otros destinos. Actualmente, junto al Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, se trabaja en el cumplimiento de los requisitos para ingresar en el mercado estadounidense, refirió Andrés Espinoza, presidente del comité organizador.
Espinoza indicó que, como parte del procedimiento, ya se envió al Departamento de Agricultura de EE. UU. un inventario de plagas. Ahora se espera una respuesta para hacer un análisis de riesgo de posibles daños. Proyectó que, luego del proceso, Guatemala podría exportar aguacate a ese mercado entre los próximos 5 y 8 años. Se estima que en el país hay 13 000 hectáreas de cultivo, de las cuales el 46% lo comprende el aguacate Hass.