El Gobierno ha apoyado a las familias afectadas, luego del accidente en México.
Los cuerpos de los 23 migrantes guatemaltecos que fallecieron en un accidente de tránsito, en el tramo carretero de Tuxtla Gutiérrez-Chicoasen, en el centro de Chiapas, México, el 7 de marzo último, ya fueron repatriados, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex).
Según los registros de la Cancillería, el traslado de los cuerpos se hizo la semana pasada. Las víctimas son 19 originarias de San Marcos, 2 de Quetzaltenango, 1 de Petén y 1 de Huehuetenango.
El Minex comunicó que de los heridos 12 están en condición estable y hospitalizados en centros asistenciales mexicanos, y 3 bajo vigilancia médica. Del resto, una parte ya retornó al país y la otra está en ese proceso.
Los connacionales viajaban en un camión, el cual volcó. Desde que se conoció el hecho, el presidente Jimmy Morales ofreció todo el respaldo del Gobierno e instruyó a la Cancillería para la asistencia. El consulado de Guatemala en Tuxtla Gutiérrez comenzó con la ayuda a los familiares de las víctimas.
Osiel Salcedo Ajualip, cónsul guatemalteco en la referida ciudad mexicana, dijo que se brindaría apoyo económico para las familias que lo solicitaran. Además, el Instituto Nacional de Migración intervino en el trámite de visas humanitarias para los afectados, por ser declarados como víctimas por la Fiscalía de Migrantes de México, según el Minex.
La Cancillería reconoció la colaboración de las instituciones mexicanas en la asistencia, como la Fiscalía General del Estado de Chiapas, la Fiscalía de Migrantes y el Grupo Beta.
Este último habilitó un albergue temporal para víctimas de trata, a donde se trasladó a quienes fueron dados de alta de los hospitales, para recibir atención psicológica, alimentación, tratamiento médico y seguridad.
En alianza
La migración irregular es atendida por los países del Triángulo Norte de Centroamérica y Estados Unidos. En febrero, reunidos en El Salvador, los ministros y secretarios de Seguridad de estas naciones firmaron una declaración conjunta para enfrentar el desafío de frenar el fenómeno.
En 2018, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones, 196 mil 61 personas del Triángulo Norte de Centroamérica fueron retornadas de México y Estados Unidos, de las cuales 95 mil 306 eran guatemaltecas.