Hasta ayer, el nivel de abastecimiento en las unidades médicas del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) estaban en 86.47 por ciento: 89.61 por ciento en el área metropolitana y 85.27 por ciento en el interior del país, según datos de la institución.
El presidente del IGSS, Carlos Contreras, refirió que se ha establecido una estrategia en la que participan las Direcciones de Logística y de Terapéutica Central, que realizan monitoreos diarios para que no falten los medicamentos ni material médico-quirúrgico.
En abril, después de una supervisión, la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) reportó escasez de suministros en el Seguro Social, por lo cual recomendó optimizar los procesos de adquisición, para no afectar a los afiliados que no pueden interrumpir sus tratamientos.
Contreras recordó que los resultados de la verificación de la PDH eran específicamente de medicamentos críticos y estratégicos, un tema que está recibiendo la atención necesaria, por lo que confió en que “a partir del segundo semestre de este año se logre la estabilidad”.
Control
“Constatamos que, en efecto, en nuestros procesos de adquisición había problemas. Cuando llegamos al IGSS los modelos de compras no beneficiaban al Instituto, sino a los proveedores. Entonces, nos dimos a la tarea de cambiar los procedimientos para garantizar el abastecimiento de calidad”, afirmó el directivo.
Asimismo, Contreras expuso que se está dando una especial atención al porcentaje de desabastecimiento, porque allí podrían ubicarse los medicamentos de alta demanda y que su inexistencia “afecta a la gente y trasciende públicamente”.