Con 122 votos favorables, entre estos el de Guatemala, la Conferencia de las Naciones Unidas adoptó el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares, durante un encuentro la semana pasada en Nueva York, Estados Unidos.
El mecanismo se abrirá a la firma de los Estados a partir del 20 de septiembre, en la sede de la instancia global, y requerirá 50 ratificaciones para que cobre vigencia.
Con esta iniciativa, los países adquieren el compromiso de no desarrollar, adquirir, almacenar, usar o amenazar con usar armas nucleares u otros dispositivos nucleares.
Asimismo, el documento incluye procedimientos para que las naciones que poseen los referidos pertrechos y que quieran sumarse, declaren y destruyan sus arsenales.
Frente a ese panorama, y reconociendo la amenaza de dichas armas para la seguridad colectiva y las consecuencias fatales a la humanidad por su uso, Guatemala destacó su compromiso con la promoción del desarme nuclear como algo prioritario.
En ese sentido, la delegación nacional participó activamente en el histórico encuentro que conllevó a la adopción del instrumento jurídicamente vinculante para prohibir los materiales destructivos.
La concreción del acuerdo se dio después de 2 sesiones que fueron desarrolladas de manera abierta, transparente e inclusiva. La primera se celebró en marzo y una segunda que comenzó el 15 de junio.
Los miembros del órgano mundial están conscientes de que el pacto es el resultado de incansables esfuerzos y una voluntad política inquebrantable por parte de una gran mayoría de Estados que decidieron romper con el estatus quo y avanzar hacia un mundo libre de esas armas.