Adriana Ruano, primera campeona olímpica de la historia de Guatemala tras ganar este miércoles el oro en foso de los Juegos de Paris, se declaró abrumada por las “muchas emociones ” que la embargaban.
“Tengo muchas emociones. No sé qué pensar. Estoy feliz y agradecida con todos”, acertó a decir.
“Mi sueño era estar en los Juegos Olímpicos en gimnasia, pero una lesión me llevó a retirarme. Estoy un deporte increíble, tengo suerte. Al principio no me gustaba, hasta que empecé sentir pasión por el tiro”, comentó.
Aquella lesión que la retiró de la gimnasia la llevó “a la desesperación y a la frustración”, porque la sacó de la rutina de entrenar, y gracias al tiro salió a flote.
Ruano se acordó de su padre, que murió un mes antes de los Juegos de Tokio, donde ocupó el puesto 26.
“Fue un momento muy difícil. Pero sentí el apoyo de mi familia y de mi entrenador”, dijo.
La tiradora guatemalteca habló también de su admiración por Rafael Nadal: “Me encanta Nadal, me ha inspirado mucho, no solo por ser un buen deportista sino por ser una buena persona. Eso es lo importantes”.