Redacción, EFE
La organización criminal guatemalteca López, dedicada al tráfico de migrantes, fue sancionada por el Gobierno de Estados Unidos, que prevé más arrestos y castigos contra otras bandas, como parte del esfuerzo de la administración del presidente Joe Biden por frenar el éxodo ilegal hacia esa nación.
El Departamento del Tesoro indicó que redes como esa colocan las ganancias por encima de la vida humana, ponen en peligro las vidas de los inmigrantes y socavan el sistema de asilo de EE. UU.
“Estas acciones que se anuncian hoy se suman a una serie de medidas que las autoridades han tomado en las últimas semanas para que las organizaciones delictivas y su personal rindan cuentas”, señaló el subsecretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) para política fronteriza, Blas Nuñez-Neto.
“Va a haber más anuncios en las semanas que siguen”, precisó Nuñez-Neto. Además de la sanción, el Departamento de Justicia presentó una acusación contra ocho miembros de la organización López, incluido Ronaldo Galindo López-Escobar, alias Tío Roni, de 46 años, quien dirige y supervisa el grupo delictivo. También, se presentaron cargos contra Elvis Bersai López-Ambrosio y Whiskey Hans López-Ambrosio, quienes supuestamente coordinaron con traficantes el paso de migrantes a través de
México.
Dos de los ocho acusados fueron detenidos, explicaron las autoridades estadounidenses.
Según la acusación, el grupo criminal pasó a miles de inmigrantes desde 2017, principalmente por Nuevo México, Arizona y California, aunque sus operaciones, además, han incluido partes de Texas.
Los investigadores federales han descubierto evidencia que sugiere que la organización López generó entre 104 millones y 416 millones de dólares en ganancias ilícitas de sus actividades de tráfico de personas entre septiembre de 2020 y abril de 2023.