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El Barça de Xavi Hernández fue superior al Olot de Tercera RFEF e hizo méritos para lograr el triunfo, hoy, en el primer amistoso de pretemporada, pero no supo traducir su superioridad en tantos y acabó cosechando un empate frustrante e insuficiente de 1-1.
El Barça, con solo cinco jugadores del primer equipo en el once inicial, dominó la posesión de manera incontestable desde el primer minuto, buscando ensanchar el campo con dos extremos muy abiertos. En la primera mitad fueron Ilias Akhomach y Ez Abde, muy dinámico, con muchas ganas de agradar y de encarar.
La primera ocasión no tardó en llegar: en el 9′, Pablo Torre demostró su calidad al superar un rival con un caño antes de asistir a Aubameyang. El meta local repelió el duro chut del atacante. Su segundo chut, en el 20′, lo rechazó el larguero, a pase de Franck Kessié. Kessié y Torre, debutantes, jugaron como interiores por delante de Nico González, pivote.
A la tercera ocasión de Aubameyang ya fue a la vencida: en el 28′, Marc-André Ter Stegen sacó en largo y el ariete, sin controlar y al primer toque, venció la salida del cancerbero del Olot desde fuera del área, con su pierna derecha.
El duelo ya parecía encarrilado, casi resuelto, pero el Olot despertó justo antes del descanso. Acarició la igualada con un cabezazo de Carles Mas que se estrelló en el palo. Y consiguió el 1-1 en el minuto 45. Mika Mármol hizo penalti y el veterano Eloi Amagat marcó con un chut ajustado al palo derecho de Ter Stegen: el alemán rozó el balón, pero no pudo impedir el tanto.
Xavi agitó el once en el descanso. Hizo nueve cambios, dando entrada a Pedri, Ansu Fati y Miralem Pjanic, Álex Collado e Iñaki Peña como nombres más reconocibles, y el Barça siguió marcando el ritmo del duelo. En el 62′, Álex Valle, primero lateral y después extremo, disparó al poste.
Antonio Aranda y Pedri, de estreno con su nuevo ‘8’, también buscaron el gol. Pero el Barça chocó una vez tras otra con el portero Albert Batalla. Y no supo pasar del gris empate. Y al final aún tuvo que dar gracias por el empate, porque el local Èric Vilanova mandó una volea al palo en el 89′.
