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El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, anunció ayer que van a explorar “inmediatamente” con las partes del conflicto Rusia-Ucrania, acuerdos y arreglos para un posible alto al fuego humanitario, lo cual permitiría progresar en negociaciones políticas serias para lograr un acuerdo de paz, y el encargado de esas gestiones sería el jefe humanitario de la ONU, el británico Martin Griffiths.
“En estos días siguen entrando en nuestras casas noticias e imágenes de muerte.” Francisco Sumo Pontífice
Por otra parte, la directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, pidió a los países con reservas nacionales de cereales y otros alimentos que las liberen y las redirijan al mercado internacional, para hacer frente a la fuerte alza de precios en el sector causada por la guerra.
En una reunión informal del Consejo General, principal órgano de la OMC, Ngozi subrayó que la cooperación internacional es esencial para hacer frente a los máximos históricos que algunos bienes básicos han alcanzado debido a la guerra entre Rusia y Ucrania, dos de los mayores productores y exportadores de cereales del planeta.
Ceremonia en el Vaticano
Desde el plano religioso, el papa Francisco consagró el viernes pasado a Rusia y a Ucrania al Inmaculado Corazón de María, en una ceremonia realizada en el Vaticano, en la que pidió la paz y condenó la guerra.
La liturgia por la paz se celebró al mismo tiempo en la Basílica de San Pedro del Vaticano y en Fátima, Portugal.
“En estos días siguen entrando en nuestras casas noticias e imágenes de muerte, mientras las bombas destruyen las casas de tantos de nuestros hermanos y hermanas ucranianos indefensos”, dijo el pontífice en su homilía.
