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Granada, EFE.- Granada y Cádiz empataron (0-0) este lunes en el Estadio Nuevo Los Cármenes, resultado que eleva a 8 las jornadas que los rojiblancos llevan sin ganar y que supone la tercera igualada seguida de un conjunto amarillo, que sigue a 4 puntos de la salvación.
La expulsión del portugués Domingos Duarte provocó que los locales jugaran en inferioridad numérica desde el minuto 33, algo que no pudo aprovechar un Cádiz, que apenas creó ocasiones de gol.
La primera parte, tan igualada como mala, estuvo marcada por el miedo a fallar y la incapacidad para trenzar acciones destacadas por parte de dos equipos empeñados en justificar su mala situación clasificatoria, algo que también hicieron en el segundo tiempo.
Se equivocó en dos ocasiones Duarte, primero con una mala cesión a su portero que no aprovecharon los visitantes de milagro y, después, derribando a Álvaro Negredo cuando era el último defensa luego de un mal pase de Germán Sánchez.
El luso vio la roja directa y dejó al Granada en inferioridad numérica en el minuto 33, aunque el partido en el primer tiempo fue exactamente igual antes que después de esa acción.
El portugués Luis Maximiano solo tuvo que intervenir ante un par de remates flojos del propio Negredo, ya que el Cádiz apenas fue capaz de crear peligro pese a estar algo mejor asentado en el campo que el Granada.
Los locales, erráticos y sin ideas, se asomaron en ataque con una arrancada del colombiano Luis Suárez y con otra de Álex Collado, bien solventadas ambas por el argentino Jeremías Ledesma.
El dominio de Cádiz, como era de esperar, fue mayor en el segundo tiempo, pero con nula claridad para poner en apuros la meta rojiblanca, mientras que el Granada se agarró a la velocidad del venezolano Darwin Machís, recuperado para la causa luego de su frustrada marcha a la MSL estadounidense.
En el minuto 69 llegó la primera, y única, ocasión clara del partido, con una gran intervención de Luis Maximiano frente a Negredo y posterior disparo fuera, por poco, de Iza Carcelén en el rechace.
El Granada, que apenas sufrió pese a la inferioridad, también tuvo su opción en un centro de Joaquín Marín Quini, que se paseó por el área cadista sin que nadie rematara ni despejara el esférico.
Rubén Sobrino, ya en el tiempo añadido, firmó el último acercamiento visitante con un cabezazo que no encontró portería.
