El rey de España, Felipe VI, inició ayer una visita oficial a Puerto Rico, con la que busca reforzar el intercambio comercial bilateral y respaldar el legado de siglos de presencia española en la isla, con motivo de los 500 años de la fundación de la capital San Juan.
En respuesta a la invitación de Miguel Romero, alcalde de San Juan, fundada por los españoles en 1521, el monarca viajó a la isla con miras a estrechar lazos culturales, pero, en especial, para equilibrar una balanza comercial favorable a este Estado Libre Asociado a EE. UU.
Durante 2020, el último del que se tienen datos, Puerto Rico exportó a España US $1323 millones, siendo un 98 por ciento productos farmacéuticos, e importó desde el país ibérico, bienes o servicios que alcanzaron los US $148 millones.
Con el objetivo de mejorar estos datos, Felipe VI llegó acompañado de la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, además de la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y Globales, Ángeles Moreno.
La consejera Económica y Comercial de España en Puerto Rico, María del Rosario Paradinas, señaló que la visita del rey puede convertirse en “una gran oportunidad para dar a conocer el interés de las empresas españolas por la isla” y contribuir a su desarrollo, trabajando de la mano de compañías locales.