Los resultados preliminares de las elecciones generales de Nicaragua, emitidos por el Consejo Supremo Electoral (CSE), que han otorgado 75 de los 90 escaños de la Asamblea Nacional (Parlamento) al oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), y confirmado la reelección de Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo, en los cargos de presidente y vicepresidenta, con el 93.6 por ciento de las actas electorales computadas, han sido objetados en el ámbito internacional.
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, rechazó ayer los resultados de las elecciones, que calificó de “ilegítimas”, y pidió a los países miembros que respondan a esta “clara violación de la Carta Democrática”.
93.6
por ciento de las actas electorales ya fueron computadas.
En tanto, la expresidenta de Costa Rica (2010-2014), Laura Chinchilla, consideró como un “fraude” los comicios, y aseguró que esa situación es un riesgo para Latinoamérica, por lo que urgió una respuesta de la comunidad internacional.
También en Sudamérica, el Gobierno de Argentina llamó a “acompañar al pueblo de Nicaragua” para que recupere “cuanto antes el diálogo y la convivencia democrática” y solicitó que el Ejecutivo de ese país vele por el “respeto” de los derechos humanos, después de las cuestionadas elecciones.
San José, EFE.