Inclusión laboral para personas con discapacidad.
Durante años, las personas con discapacidad han sido excluidas de la sociedad, marginadas, maltratadas y con muy pocas oportunidades, sin optar por un trabajo digno y realizarse como seres humanos. Llevar el sustento al hogar es una realidad para muy pocos.
Es por esa razón que el Organismo Judicial (OJ) y la Corte Suprema de Justicia (CSJ) han impulsado campañas y proyectos de inclusión para personas con discapacidad. Esto le ha cambiado la vida a Edgar Morales, de 61 años, quien padece de discapacidad visual y, gracias a una oportunidad de trabajo, ha podido llevar sustento a su familia y realizar sus proyectos.
Trabaja en un módulo de fotocopias instalado en el edificio de Justicia Laboral, en la zona 10 capitalina, gracias a una alianza entre el OJ y el Benemérito Comité Pro Ciegos y Sordos de Guatemala. Su día comienza desde muy temprano, para atender a los usuarios que con amabilidad lo describen como una persona atenta. “¿Cuántas copias necesita?”, pregunta a los usuarios, siempre con una sonrisa. Diariamente, atiende de 25 a 40 personas. William Rodríguez, usuario del local, comentó que Edgar siempre tiene la mejor actitud y un excelente servicio al cliente. Este claro ejemplo de inclusión es parte de la Política de Acceso a la Justicia para personas con discapacidad que recientemente lanzaron OJ y CSJ, y que vela por la movilidad, seguridad, comunicación e información de las personas que padecen de algún tipo de discapacidad.
La política también vela por la instalación de rampas de acceso y salida en los edificios judiciales. En la Torre de Tribunales, los elevadores cuentan con sistema braille. Actualmente, cuatro edificios de justicia en la ciudad capital cuentan con módulos de fotocopias, y se estima que este número crezca, como parte de un proyecto que busca mejorar la calidad de vida de quienes padecen de algún tipo de discapacidad.