Países deben tener acceso equitativo al fármaco, insiste la organización.
Implementar planes de vacunación en los países pobres y en vías de desarrollo es fundamental para propiciar la recuperación económica mundial, afirmó el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.
En un debate organizado ayer por la OCDE, foro multilateral con sede en París, que engloba a la mayoría de países ricos, también intervinieron altos representantes gubernamentales y de organizaciones internacionales, quienes criticaron “el nacionalismo” de algunos gobiernos por ignorar el combate global de la pandemia del cornavirus.
En su alocución, Tedros sostuvo que la distribución igualitaria de las vacunas contra el Covid-19 es fundamental, tanto por cuestiones “morales como económicas”, cuando la pandemia deja ya 106 millones de infectados y 2.3 millones de muertes, desde que se detectó la enfermedad hace poco más de un año.
Según el anfitrión del encuentro, el secretario general de la OCDE, el mexicano Ángel Gurría, la vacunación universal “no se trata solo de un imperativo moral, se trata también de que es clave para la recuperación económica global. Debemos luchar juntos”. Sin embargo, Tedros recordó que el 75 % de las dosis de vacunas contra el virus se ha inoculado en apenas diez naciones.
“No es justo que haya países en los que se vacuna a jóvenes saludables, mientras en otros de ingresos medios o bajos ni siquiera los sanitarios tienen acceso”, criticó.
Según el organismo, no se ha puesto ni una sola dosis de vacuna en 130 naciones que albergan conjuntamente una población de 2,500 millones de personas.
Las vacunas de BioNTech/Pfizer, Moderna y AstraZeneca se han aplicado mayoritariamente en las naciones desarrolladas, mientras que las de China (Sinopharm) y de Rusia (Sputnik V) sí se han extendido algo en países en desarrollo.
Tedros citó el mecanismo Covax, un fondo de acceso global para vacunas contra el Covid-19 formado por actores públicos y privados, como una de las iniciativas que pueden contribuir a una distribución más equitativa.
Uno de los principales donantes de esta plataforma es Noruega, que está entre los países más ricos del mundo.