Después de que circularán dos antiguas fotografías de la mexicana Eiza González en las que aparece con la cara pintada de negra y de geisha, la actriz fue acusada de racista y por ello reiteró sus disculpas por medio de mensajes directos y comunicados a algunos medios estadounidenses.
González fue tendencia ayer en redes sociales luego de que un medio mostrara fotos del supuesto romance de la mexicana con el actor franco-estadounidense Timothée Chalamet y algunos aprovecharon el momento para revivir imágenes que perjudicaron a la actriz tachándola de racista.
La primera de ellas muestra a González personificada con maquillaje para hacerla ver como una persona negra. La imagen fue tomada de la telenovela juvenil Lola,érase una vez (2007), el primer papel protagonista de la actriz en telenovelas mexicanas.
“Me siento muy avergonzada de haber usado maquillaje de cara negra en las imágenes que circulan. Tenía 15 años y fue mi primer trabajo como niña actriz en una telenovela mexicana, fui presionada en contra de mi voluntad y no tenía poder de negociación, no pude evitar la ignorancia ‘a lo largo de mi carrera’ y no tuve la intención de ofender a nadie”, expresó la actriz.
La segunda imagen que la pone en una situación complicada, muestra a la actriz vestida de geisha, algo que generó ciertos comentarios negativos con los que ciertas personas la acusaron de apropiación cultural. Sin embargo, la actriz aseguró que se trataba de una cuestión de respeto.
“Se trata de una tradición en Gion, Tokyo. Si una geisha te invita a vestirte como ella es un honor y la intención es apreciar su cultura, nunca lo hubiera hecho para insultar una cultura o por apropiación cultural. Pero me he dado cuenta que no se tomó con esa buena intención y me disculpo si ofendí a alguien”, escribió la actriz en un mensaje.
González también expresó que es importante para ella educarse para poder ser la voz de quienes no la tienen y se mostró activa frente al reciente movimiento Black Lives Matter que se desató luego de la muerte de George Floyd en Estados Unidos a manos de policías.
*EFE