La cantautora estadounidense Betty Wright, considerada una de las reinas de la música soul, murió a los 66 años, meses después de haber sido diagnosticada de cáncer.
Según el empresario discográfico Steve Greenberg, de S-Curve Records, quien era cercano a la artista, Wright falleció en su casa en Miami (EE.UU.) ayer, dejando cuatro hijos e igual número de hermanos.
Wright se convirtió en una de las figuras más relevantes de la música afroamericana de los años 70, cuando en 1971 explotó en el mercado con su tema Clean Up Woman, que combinaba elementos de funk, souly R&B.
Tenía apenas 17 años cuando la canción llegó a las listas de las 10 canciones más escuchadas en Estados Unidos, tanto en las carteleras Billboard de los géneros pop y R&B.
El reconocido tema es usado hoy como parte de otras composiciones con la técnica conocida como sampling, que consiste en poner trozos de canciones famosas dentro de otras, principalmente dentro del género urbano. Un ejemplo es Real Love, de Mary J. Blige, en la que P.Diddy, fungiendo como productor, puso un tramo de Clean Up Woman.
Aunque la cantante no volvió a tener un éxito de esa magnitud, Wright, cuyo nombre legal era Bessie Regina Norris, siguió trabajando y logró posicionar otras 20 canciones entre las más escuchadas de la cartelera R&B.
Wright también fue una de las primeras estrellas del pop en cantar en los altísimos registros que han hecho famosas a Mariah Carey y Ariana Grande, entre otras.
Además, compuso y arregló algunos de los éxitos de artistas tan diversos como Stevie Wonder, Bob Marley, Michael Jackson, Stephen Stills, David Byrne, Alice Cooper, Jennifer López, Gloria Estefan y Miami Sound Machine y Erykah Badu, entre otros.
La artista, considerada una pionera en abrir nuevos espacios para las mujeres en la industria musical, fue la primera artista femenina en conseguir un disco de oro con su propio sello discográfico, con el tema No Pain, No Gain, que compuso, cantó y publicó con su empresa Ms. B Records.
*EFE