Con la latina Rachelle Vinberg como protagonista, HBO presenta el viernes Betty, una serie feminista, de aire rebelde y que lanza una apología de la sororidad, acerca de un grupo de chicas que trata de hacerse hueco en el mayoritariamente masculino mundo de los skaters.
Dirigida por Crystal Moselle, Betty se basa en la película Skate Kitchen (2018), de la misma cineasta, y muestra a un grupo de adolescentes explorando sobre sus monopatines todos los rincones de Nueva York mientras reflexionan sobre la sexualidad, el machismo, las drogas, la presión familiar o la apropiación cultural.
“Es algo que puedes hacer por tu cuenta: no necesitas un equipo, no hay reglas… Algo de todo eso me atrajo”, comentó Rachelle Vinberg, joven estadounidense de madre colombiana, sobre sus inicios en el skateboarding.
Vinberg, como el resto de actrices de Betty, interpreta a personajes ficticios pero muy basados en sus propias vidas, que giran en torno a su absoluta pasión por las tablas.
“Dios, he pensado mucho sobre esto: ¿cómo explicarlo a la gente que no hace skate? Pero supongo que es como… ¿has ido alguna vez a esquiar o a surfear? Ni siquiera hace falta que sea surfear. Es como estar en el océano con tus amigos, con grandes olas (…) y da miedo, pero, oh, se siente muy bien y es muy divertido”, dijo entre risas.
“En la ciudad, cuando estás sobre una tabla, simplemente sientes que puedes salirte con la tuya en todo. Es como que tienes esa protección”, consideró.
Esa arrebatadora libertad que da el skateboarding es uno de los puntos fuertes de Betty, que refleja una imagen muy viva, frenética y apasionante de Nueva York en un momento en el que, paradójicamente, la Gran Manzana pasa por uno de los momentos más sombríos de su historia.
“Es curioso que la serie se estrene ahora porque muestra a Nueva York, uno de los lugares más golpeados por el coronavirus, cuando era libre, cuando podías salir afuera”, apuntó. “Y me entristece no poder salir, pero creo que ahora hay problemas mucho más importantes. La gente se está muriendo así que no me quejo”, añadió.
Vinberg repite en esta serie, junto a otras intérpretes como Ajani Russell o Nina Moran, tras participar en Skate Kitchen, cinta que pasó por el Festival de Sundance y en la que la directora Crystal Moselle ya abordó el tema del feminismo en la comunidad skater. “Cuando conocí a Crystal, simplemente se convirtió en mi amiga”, recordó.
“Es como que he olvidado que la conocí cuando yo tenía 17 años. Me parece que la he conocido durante toda mi vida, es como si fuera una pieza que me faltaba. Nos sentimos muy cómodas compartiendo cosas, no hay juicios de valor, nos reímos todo el rato. Somos el mismo tipo de persona (…). Pero había momentos en que tenía que recordar: ‘Ahora es la directora, no mi amiga’”, bromeó.
Aunque las conexiones entre Skate Kitchen y Betty son evidentes, la actriz aclaró que hay muchas diferencias ya que los personajes son distintos y la película se centraba más en su rol mientras que la serie tiene un enfoque “más interesante” al describir las aventuras corales de un grupo de chicas.
En este sentido, Vinberg no escondió que en el mundo de los skaters también hay discriminación machista a las mujeres, aunque a veces de formas no frontales o explícitas.
“En los skate park es algo como pasivo-agresivo: no te van a decir algo directamente. A veces son rudos y te dicen cosas, pero la mayoría de veces no dicen nada y solo te sueltan una mirada”, contó.
“Pero en internet es donde realmente salen: ‘Esta chica hace skate porque quiere conseguir seguidores en las redes, esta chica hace skate porque se quiere ver bien, por qué recibe tanta atención, esta chica apesta’”, ejemplificó.
“¿Por qué no podemos solo hacerlo porque es divertido y tenemos que tener a toda esa gente diciendo por qué lo hacemos? Hay mucho odio contra las mujeres y no sé de dónde viene, supongo que de la sociedad, la inseguridad y ese tipo de cosas”, reflexionó Vinberg.
*EFE