Fetch The Bolt Cutters es el intrincado título del disco de la intérprete y compositora estadounidense Fiona Apple lanzó tras ocho años de silencio y que supone una obra magna para la crítica, que no ha dudado en calificarla en muchos casos con matrícula de honor.
Se trata del quinto álbum de estudio para esta artista estadounidense de música alternativa, que se ha encargado también de la producción y que no lanzaba un trabajo de material inédito desde The Idler Wheel… (2012).
Han sido muchos años de búsqueda para su elaboración, ya que se ha documentado en 2015 el inicio de sus sesiones de preparación, desarrolladas entre los estudios Sonic Ranch (Tornillo, Texas) y sobre todo la casa que la propia Apple tiene en Venice Beach, en Los Angeles.
Acompañada como siempre de su piano, para la grabación del álbum ha contado con la participación del bajista Sebastian Steinberg, el guitarrista David Garza y la percusionista Amy Aileen Wood.
Precisamente esta labor ha proporcionado al sonido final uno de sus componentes más experimentales, pues gran parte procede del repiqueteo de diversos instrumentos contra todo tipo de superficies y objetos caseros.
La crudeza obtenida en algunos momentos y los cambios de tempo dentro de las canciones ayudan a empujar el mensaje global de este Fetch The Bolt Cutters, que según su autora implica “no tener miedo a hablar”.
El título, de hecho, fue extraído del guion de la serie de televisión The Fall, protagonizada por Gillian Anderson, cuyo personaje pronuncia esta frase cuando se dispone a investigar el crimen de una mujer torturada.
Apple ofreció una entrevista en marzo con The New Yorker en la que abundó por ejemplo en las razones que la llevaron a dejar el consumo de cocaína y en la que calificó de “dolorosa y caótica” su relación de tres años con el director de cine Paul Thomas Anderson.
De Fetch The Bolt Cutters ha dicho la crítica que es “una sinfonía salvaje de lo cotidiano, una obra maestra inquebrantable”. Es la opinión de revistas especializadas como Pitchfork, para la que “ninguna música ha sonado tan bien”.
“Este es un álbum que transmite la ira, la vulnerabilidad, la confusión y la sabiduría de una mujer de formas que no habíamos escuchado antes”, escribe The Telegraph.
*EFE