El expresidente del Gobierno español José Luis
Rodríguez Zapatero asegura que está próximo un “diálogo con acuerdo y salida
electoral” en Venezuela, y advierte de que la comunidad internacional “condena”
a ese país “pero está mal informada”.
Zapatero se reunió el pasado viernes por
sorpresa con el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, en la sede del Gobierno
venezolano, el Palacio de Miraflores de Caracas, un viaje que el Ejecutivo
español ha precisado realizó “a título personal”.
En una entrevista publicada hoy por el diario
digital El Español, el expresidente socialista (2004-11) subraya que España
debe ayudar en la resolución pacífica de los conflictos en Latinoamérica “pero
entendiendo la complejidad y la pluralidad, a veces radicalizada”.
Desde 2015, cuando Rodríguez Zapatero ejerció
como observador electoral, ha estado vinculado a Venezuela hasta el punto de
ejercer como mediador entre Maduro y la oposición, en un proceso tras el que
los detractores del chavismo le han llegado a considerar como un simpatizante
del oficialismo.
Zapatero explica en la entrevista que la versión
extendida entre la opinión pública internacional es incorrecta y fruto de
intereses políticos, pero que la realidad venezolana no es “blanco o negro”.
Señala que el camino que se ha seguido por parte
de la comunidad internacional, impulsado por el presidente de Estados Unidos,
Donald Trump, “es equivocado, plagado de mala información de lo que pasa allí
desde supuestos falsos y además transitando por ese recorrido siempre
arriesgado que es saltarse las reglas”.
“Insisto – prosigue -, de Venezuela se nos ha
contado sólo una parte de la realidad. Es un país hermano, hay dos bloques que
parece que son irreconciliables y hay que ponerles de acuerdo en el respeto a
las reglas”, dice Zapatero, para quien resulta evidente que España debe adoptar
una postura activa en este y otros conflictos de la zona.
En su opinión, “no estamos tan lejos de ver un
proceso en el que se encauce un diálogo con acuerdos y salida electoral.
Serviría de lección a la comunidad internacional”. Madrid, EFE