Estados Unidos aseguró que los ataques con misiles contra bases iraquíes no causaron bajas.
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció nuevas y “poderosas” sanciones económicas contra Irán, a la vez que instó a las potencias mundiales a que “rompan” con el acuerdo nuclear de 2015 con Irán, para renegociar un nuevo pacto.
“Mientras seguimos evaluando opciones, Estados Unidos inmediatamente impondrá sanciones adicionales contra el régimen iraní, hasta que Irán cambie su comportamiento”, avisó el mandatario.
El ataque de Irán a dichas bases en Iraq supone la primera respuesta al asesinato del general iraní Qasem Soleimaní, la pasada semana, cerca del aeropuerto de Bagdad.
Trump indicó que, tras el lanzamiento de los misiles, “Irán parece estar retirándose, lo cual es algo bueno para todas las partes interesadas y algo muy bueno para el mundo”.
Sin embargo, agregó: “Debemos trabajar todos juntos hacia un acuerdo con Irán que haga del mundo un lugar más seguro y pacífico”.
En relación con el ataque lanzado la madrugada de ayer contra las bases iraquíes, que albergan tropas estadounidense, el gobernante aseguró que no hubo “bajas mortales” y que el daño material fue “mínimo”.
“Ningún estadounidense sufrió daños. No hemos sufrido bajas mortales”, dijo Trump en su declaración a la nación desde la Casa Blanca.
Por último, Trump envió un mensaje conciliador: “EE. UU. está preparado para abrazar la paz con todos aquellos que la buscan”.
Piden cese de violencia
Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, insistió a los líderes del mundo en que detengan la escalada de violencia.
“El lunes, el secretario general hizo un ardiente llamamiento por la paz. Su mensaje a los líderes del mundo fue simple: Detengan la escalada. Ejerciten la máxima moderación. Restablezcan el diálogo. Renueven la cooperación internacional”, dijo su portavoz Stéphane Dujarric, e insistió en que este llamado “hoy sigue siendo tan importante como el lunes”.
Dujarric explicó que Guterres continuará sus contactos “activos” con actores relevantes para intentar reducir la tensión. “Es nuestro deber común hacer todos los esfuerzos posibles para evitar una guerra en el Golfo”, subrayó.