Las autoridades de Panamá informaron que se ha incrementado la llegada de nicaragüenses al país que huyen de la crisis política de Nicaragua.
La directora del Servicio Nacional de Migración, Samira Gozaine, explicó que se trata de nicaragüenses que han ingresado de forma ilegal “para quedarse” en Panamá, donde actualmente hay unos 60 nacionales de ese país en albergues migratorios con miras a su deportación o expulsión.
Nicaragua atraviesa una grave crisis sociopolítica que, desde el estallido social contra el presidente Daniel Ortega, en abril de 2018, ha dejado más de 300 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque organismos locales elevan la cifra a más de 500 y el Gobierno reconoce 199.
Gozaine aseguró que esa subida en la llegada de nicaragüenses a Panamá, que no cifró, se debe al reforzamiento de las fronteras en los territorios de paso, como parte de la política que intenta frenar el flujo migratorio irregular hacia Estados Unidos.
A Panamá también llegan centenares de migrantes de países africanos, asiáticos, caribeños y sudamericanos, que tienen como destino final Norteamérica. Panamá, EFE